MÚNICH (dpa-AFX) - El contratista de defensa Rheinmetall aspira a una tajada especialmente grande del fondo especial de 100.000 millones de euros del Gobierno alemán. "Se puede suponer que al final recibiremos entre 30.000 y 40.000 millones de euros de los fondos especiales", dijo el director general de la empresa, Armin Papperger, al diario "Süddeutsche Zeitung" (edición del sábado). "Para defensa aérea, camiones, munición, nuestra parte del programa F35 y mucho más".

El hecho de que el constructor de carros de combate y fabricante de municiones tenga probablemente para sí la mayor parte del programa de Berlín se debe al tamaño de la empresa. "También somos la mayor empresa alemana en este ámbito", afirma Papperger. "Si hubiéramos recibido la parte más pequeña, entonces habríamos hecho algo mal".

Si se agotan los activos especiales de la Bundeswehr, "sólo hay dos opciones", dijo el directivo. "Puedes endeudarte de nuevo o reasignar dinero del presupuesto". No hay "ninguna alternativa", porque "de lo contrario el cambio de rumbo habría terminado en 2026" y estaríamos "peor que antes", dijo Papperger. Alemania tendría entonces "más equipamiento militar", pero "ya no podría pagar su despliegue". Además, también se necesitaría personal y habría que pagar a los soldados.

Para jugar en "la misma liga que los americanos", según el jefe de Rheinmetall, las grandes empresas europeas de defensa tendrían que unir sus fuerzas. "Necesitamos un campeón europeo de armamento". El propio Papperger intentó hacerse con el fabricante de blindados muniqués Krauss-Maffei Wegmann (KMW) junto con Rheinmetall hace seis años. Sin embargo, la empresa está ahora asociada con la compañía francesa de armamento Nexter. No cree "que Francia apoye hoy una adquisición por parte de Rheinmetall", dijo Papperger. Actualmente "no hay conversaciones de ningún tipo". Pero la empresa está "abierta a todo".