PARÍS, 30 ago (Reuters) - Los precios de los supermercados en Francia no bajarán de forma significativa antes de marzo, dijo el miércoles el jefe de la cadena de supermercados Les Mousquetaires, haciéndose eco de la advertencia de un grupo rival de que los consumidores franceses estaban gastando menos debido al alto costo de la vida.

Thierry Cotillard, cuyo grupo tiene más de 3.000 tiendas en Francia, se encuentra entre los ejecutivos del sector minorista que se reunieron el miércoles con el ministro de Economía, Bruno Le Maire, para debatir cómo acelerar las rebajas de precios. Le Maire se reunirá el jueves con los grupos de bienes de consumo que suministran sus productos a los minoristas.

Antes de la reunión del miércoles, Cotillard declaró a la radio RTL que los consumidores franceses habían reducido sus compras en los supermercados en torno a un 5% en términos de volumen y compraban menos productos frescos como pescado y carne, añadiendo que no esperaba "ninguna mejora" en el nivel general de precios antes de marzo.

"Es realmente preocupante, ya que los franceses consumen menos (...). No es bueno para la economía, no es bueno para los negocios", afirmó.

"Estamos viendo más caídas en los precios de las materias primas que subidas, tuvimos el petróleo y el trigo y ahora el papel. Los minoristas están trasladando esas bajadas a los consumidores con sus propias marcas blancas, pero la ley no obliga a las marcas nacionales a renegociar sus precios. Algunas se prestan a ello, pero otras no", agregó.

El martes, el presidente ejecutivo del minorista francés Carrefour, Alexandre Bompard, advirtió que los altos precios han obligado a los consumidores a hacer recortes masivos en el gasto en bienes esenciales e instó al gobierno a retrasar una ley que pone un tope a las promociones que pueden ofrecer los minoristas.

En una carta enviada esta semana a los legisladores, Bompard, que también preside el grupo de presión de la industria minorista Federation du Commerce et de la Distribution, señaló que las ventas de productos menstruales, pañales y tratamientos de primeros auxilios habían disminuido, lo que demuestra que las familias francesas no pueden permitirse artículos básicos.

A medida que se atenúa el choque inflacionario europeo, Francia experimenta un menor retroceso de los precios que otros países, debido al repunte de la inflación alimentaria, que en julio se situó en más del doble de la tasa general de inflación francesa (5,1%).

(Reporte adicional de Helen Reid en Londres; escrito por Silvia Aloisi; editado en español por Carlos Serrano)