WILHELMSHAVEN (dpa-AFX) - Tras años de planificación, ha comenzado en Wilhelmshaven la fase de construcción de la primera línea eléctrica a través del Mar del Norte entre Gran Bretaña y Alemania, que tendrá más de 700 kilómetros de longitud. El cable eléctrico conectará las redes energéticas de ambos países y garantizará la flexibilidad en el transporte de energías renovables, declaró el martes el Ministro Federal de Economía, Robert Habeck (Verdes), en una ceremonia simbólica de colocación de la primera piedra. "Cuanto más interconectada esté Europa, cuanto mayor sea la red, más eficazmente podrá funcionar y controlarse el sistema y más se podrá alcanzar el objetivo de la descarbonización, es decir, un suministro eléctrico neutro desde el punto de vista climático".

Habeck habló de un "proyecto realmente grande" que también conectaría las principales regiones de generación de energía eólica de los dos países. El excedente de energía eólica, que se produce en el Mar del Norte alemán pero aún no puede transportarse a tierra debido a los cuellos de botella de la red eléctrica, podría exportarse al Reino Unido a través del cable submarino. En la actualidad, el Reino Unido importa más electricidad de la que exporta.

El Vicecanciller asistió a la ceremonia de colocación de la primera piedra junto al Secretario de Estado británico de Política Comercial, Gregory Hands, el Ministro de Economía de Baja Sajonia, Olaf Lies (SPD), y la Presidenta de la empresa del proyecto Neuconnect, Julia Prescot. La planificación del proyecto comenzó a finales de 2016. Los trabajos de construcción ya han comenzado en el Reino Unido. Está previsto que el cable, que discurrirá en gran parte por el Mar del Norte, entre en funcionamiento en 2028.

La Presidenta de Neuconnect, Julia Prescot, afirmó que la inversión del sector privado es necesaria para llevar a cabo la transición energética; la autopista de la electricidad es un ejemplo de ello. "Somos el mayor proyecto de inversión anglo-alemán", afirmó. Los costes de inversión, de casi 3.000 millones de euros, corren a cargo de un consorcio internacional. Entre los participantes figuran el inversor francés Meridiam, el Grupo Allianz y los proveedores de energía japoneses Kansai Electric Power y Tepco, así como un consorcio de más de 20 bancos. Según la empresa del proyecto, no habrá subvenciones estatales.

La línea, denominada Neuconnect, podrá transportar hasta 1,4 gigavatios de electricidad en ambas direcciones, lo que equivale aproximadamente a la producción de una central nuclear y, según la empresa del proyecto, energía suficiente para alrededor de 1,5 millones de hogares. El cable, de 725 kilómetros de longitud, conectará la red de transmisión alemana de Wilhelmshaven con la británica en la isla de Grain, en el condado inglés de Kent, en la desembocadura del Támesis.

Según la Agencia Federal de Redes, este tipo de autopistas eléctricas entre países, también conocidas como interconectores, pueden mejorar la seguridad energética e impulsar la competencia, lo que puede dar lugar a precios de la electricidad más favorables. Según la agencia, las conexiones directas entre mercados eléctricos aumentan las oportunidades de venta. Así, los países pueden beneficiarse mutuamente de las condiciones de generación más favorables. Alemania cuenta actualmente con 54 interconectores de este tipo y hay 16 más en proyecto.

El Ministro de Economía de Baja Sajonia, Lies, afirmó que la transición energética también se centra en el noroeste de Baja Sajonia y la región en torno a Wilhelmshaven. "Sin Baja Sajonia, la transición energética y la consecución de los objetivos climáticos en Alemania no serían posibles". Es importante que esta región también se beneficie económicamente. "También queremos que los lugares que serán emplazamientos energéticos en el futuro, porque se dispone de grandes cantidades de energías renovables, sean también emplazamientos para un mayor desarrollo económico".

El Secretario de Estado británico de Política Comercial, Gregory Hands, habló de un "momento simbólico para ambos países". La nueva línea eléctrica es un "proyecto emblemático" que ilustra la estrecha colaboración entre Alemania y el Reino Unido para conseguir que las dos economías sean neutras desde el punto de vista climático. "Queremos convertir el Mar del Norte en el centro neurálgico de la energía verde en Europa, y la cooperación entre Alemania y el Reino Unido será crucial para lograrlo".

Según los expertos, la importancia del Reino Unido como mercado eléctrico seguirá creciendo con el enlace eléctrico con Alemania. "Las Islas Británicas son ya el segundo mercado mundial de energía eólica marina, después de China", declaró Marc Lehnfeld, de la empresa federal Germany Trade and Invest (GTAI), a la Agencia Alemana de Prensa en Londres. Hasta ahora, el Reino Unido sigue siendo un importador neto de electricidad. Sin embargo, el Gobierno británico quiere aumentar significativamente la capacidad eólica marina de 15 a 50 gigavatios (GW) para 2030. Esto también impulsará el potencial de exportación, dijo Lehnfeld.

Las empresas alemanas también participan en el mercado británico de la energía eólica marina. "RWE es uno de los mayores promotores del país, con diez proyectos eólicos marinos en curso y nueve previstos", dijo Lehnfeld. "EnBW también está desarrollando actualmente tres parques eólicos marinos en la costa británica."/len/DP/tih