Varios de los principales bancos rusos han sido bloqueados del sistema internacional de pagos SWIFT en respuesta a las acciones de Moscú en Ucrania.

Los bancos rusos también han tenido que enfrentarse a un menor acceso a las divisas, a movimientos bruscos de los tipos de interés y a un descenso de los beneficios, aunque el hecho de que el prestamista dominante, Sberbank, obtuviera beneficios entre enero y octubre fue una prueba de la resistencia del sector.

Las pérdidas del sector bancario ruso se redujeron a 400.000 millones de rublos (6.540 millones de dólares) hasta el 1 de noviembre, desde los 1,5 billones de rublos del 1 de julio, según informó el jueves el banco central, gracias en parte a la menor volatilidad y a la recuperación de los márgenes.

Las sanciones han tenido un claro impacto: los bancos rusos registraron unos beneficios récord de 2,4 billones de rublos en 2021.

El banco central dijo esta semana que revocaría algunas medidas de apoyo a los bancos rusos a partir del 1 de enero. Entre otras cosas, tendrán que reanudar la divulgación de los estados financieros, aunque en un formato restringido.

"Para evitar la acumulación de riesgos sistémicos y mantener la estabilidad del sector bancario en el futuro, es importante revocar la flexibilización regulatoria y avanzar hacia el restablecimiento de los colchones de capital", dijo el banco.

Las pruebas de estrés sugieren que el sector bancario es relativamente estable, dijo el banco central, que espera que los bancos mantengan un importante colchón de capital en 2023 y tengan potencial para conceder préstamos por valor de unos 40,7 billones de rublos.

"Sin embargo, algunos bancos podrían necesitar una recapitalización en caso de crisis: la cantidad total (de capitalización) se estima en hasta 0,7 billones de rublos", dijo el banco.

(1 dólar = 61,2000 rublos)