SciSparc Ltd. ha anunciado los resultados positivos de su estudio de SCI-210 sobre el estado epiléptico, realizado en el Fondo Sheba de Servicios e Investigación Sanitarios del Centro Médico Chaim Sheba, que reafirman el potencial de sus productos combinados patentados para tener un efecto positivo al tiempo que se minimizan los efectos secundarios adversos. La plataforma SCI-210, propiedad de la empresa, combina palmitoiletanolamida ("PEA") con cannabidiol ("CBD"). El objetivo del ensayo no clínico era estudiar los posibles efectos terapéuticos de la SCI-210 en la SE y en los marcadores neurobioquímicos de las secuelas cognitivas neurológicas.

Se utilizó un modelo de ratones (machos C57BL/6) inducidos por SE con pilocarpina para estudiar los efectos del SCI-210 sobre la gravedad de las convulsiones y la mortalidad. Después de la calibración, se estudiaron cuatro grupos de animales: un grupo de CBD de dosis alta efectiva, un grupo de CBD de dosis subefectiva, un grupo de SCI-210 (una combinación de CBD de dosis subefectiva y PEA) y un grupo de control no tratado. Los resultados indicaron diferencias en la tasa de mortalidad, así como en las tasas de convulsiones a lo largo del tiempo.

En el grupo de dosis baja de CBD se observó una tasa de mortalidad más elevada (aunque no significativa), por lo que es razonable pensar que no se logró un impacto significativo en la protección neuronal. En el grupo de CBD alto, se encontraron niveles más altos, aunque no significativos, de protección neuronal junto con una tasa de mortalidad menor en comparación con el control. Curiosamente, el nivel de protección neuronal en el tratamiento con SCI-210 fue significativamente mayor en comparación con el grupo de control y no se encontró mortalidad en este grupo.

Se concluyó que el tratamiento con SCI-210 puede ser potencialmente más eficaz que una monoterapia con CBD. Además, dado que las concentraciones utilizadas en el tratamiento combinado son significativamente inferiores a las recomendadas para la monoterapia con CBD, este tratamiento también tiene el potencial de ser más seguro. La SE es una emergencia médica común potencialmente mortal que se caracteriza por un ataque epiléptico agudo y prolongado.

La SE puede representar tanto la exacerbación de una crisis preexistente como la manifestación inicial de la epilepsia. Para evitar secuelas neurológicas, debe iniciarse un tratamiento oportuno en un entorno hospitalario. Cuando las convulsiones continuas no responden al tratamiento farmacológico convencional, la SE puede plantear graves riesgos para la vida.