"Hemos tenido un número significativo de cancelaciones y retrasos de vuelos en los últimos días debido a varias razones, entre ellas la falta de disponibilidad de tripulación", dijo un portavoz de la compañía en un comunicado.

Vistara, propiedad de Tata Group y Singapore Airlines, está utilizando aviones más grandes, incluido el Boeing 787 Dreamliner de fuselaje ancho en ciertas rutas nacionales "para acomodar a más pasajeros, siempre que sea posible", dijo el portavoz.

La aerolínea, que se fusionará con Air India, propiedad de Tata, sufrió interrupciones similares el mes pasado.

Los medios de comunicación locales habían informado de que un número creciente de sus pilotos habían declarado estar enfermos. En respuesta, Vistara había dicho que la interrupción no se atribuía únicamente al absentismo de los pilotos, ya que también tuvo que hacer frente a ciertas necesidades imprevistas de mantenimiento.

La interrupción de los vuelos de Vistara se produce cuando el organismo de control de la aviación india ha aplazado el plazo del 1 de junio para que las aerolíneas adopten nuevas normas sobre los tiempos de descanso y servicio de los pilotos, una medida que ha suscitado las críticas de algunos pilotos y expertos en seguridad aérea.