Skanska AB (publ) invierte 1.100 millones de coronas checas, unos 480 millones de coronas suecas, en un proyecto residencial en Praga, República Checa. El edificio residencial Alfred consta de 179 apartamentos construidos en 11.000 metros cuadrados. El edificio de 10 plantas ofrecerá un predominio de viviendas de 1 y 2 dormitorios.

Este proyecto forma parte de la segunda fase del proyecto de desarrollo residencial Emil Kolben Quarter en Praga. El proyecto está diseñado para recibir la certificación medioambiental BREEAM. La empresa está instalando paneles fotovoltaicos en el tejado que alimentarán la iluminación de los pasillos y el sistema de ventilación de los apartamentos.

Alfred conseguirá un 24% más de eficiencia energética en comparación con un edificio de referencia.