Funcionarios estadounidenses afirman que piratas informáticos rusos tienen en el punto de mira servidores que alojan software vulnerable fabricado por la empresa tecnológica checa JetBrains para posibles operaciones de espionaje al estilo de SolarWinds.

En un comunicado, la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense, el FBI y la agencia de vigilancia cibernética CISA acusaron al grupo, a veces conocido como Cozy Bear o APT29, de intentar secuestrar los servidores en un intento de acceder al código fuente de los desarrolladores de software, algo que potencialmente podría permitirles manipular su compilación o despliegue.

Una técnica similar se utilizó para adulterar el software fabricado por la empresa de software estadounidense SolarWinds, señala el comunicado. Esa campaña de ciberespionaje provocó una oleada de graves infracciones en todo el gobierno.

La declaración fue firmada conjuntamente por el Centro Nacional de Ciberseguridad de Gran Bretaña, así como por el Servicio de Contrainteligencia Militar de Polonia y su Equipo de Respuesta a Emergencias Informáticas. (Reportaje de Raphael Satter; edición de Jonathan Oatis)