Invariablemente, tras el subidón de adrenalina y el pico de euforia llega el bajón y luego la resaca. ¿Saldrá TSMC de esta fase?
El grupo taiwanés, que publicó ayer sus resultados trimestrales, también está sufriendo las condiciones desfavorables que asolan al sector de los semiconductores en su conjunto. Esto último, entre otros, queda bien ilustrado por los recientes anuncios de resultados de Micron y ASML -debatidos ayer en esta misma columna-.
TSCM también habría obtenido buenos resultados sin la publicidad de los últimos días. Warren Buffett ha confirmado que la venta de su participación -en manos de Berkshire desde hace sólo unas semanas- estuvo motivada por el aumento del riesgo geopolítico.
Es un mal negocio, pero es cierto que cada vez es más difícil ignorar las crecientes tensiones entre China y Estados Unidos. Las elecciones presidenciales de 2024 en Taiwán ya están cristalizando todos los peligros. A principios de este año, un general de cuatro estrellas de la Fuerza Aérea estadounidense predijo un conflicto abierto ya en 2025 entre las dos superpotencias.
Volvamos a los datos financieros. La facturación de TSMC descendió un 16% respecto al trimestre anterior; sus entregas, un 13%; sus beneficios contables, un 6%; mientras que sus beneficios en efectivo, también conocidos como "free cash-flow FCF", se redujeron a la mitad.
Este descenso se debe principalmente a las fuertes caídas en los segmentos de smartphones y HPC "high performance computing", computación de alto rendimiento), que juntos representan las cuatro quintas partes de la facturación de TSMC.
La empresa taiwanesa conserva una ventaja sustancial sobre Intel. Invierte entre 10.000 y 15.000 millones de dólares más al año, lo que le permite afianzar aún más su dominio tecnológico. Su balance es excelente, sin deuda neta, a diferencia del del grupo americano, que opera con poco margen de maniobra.
Pero el valor de empresa actual de TSMC es de 412.000 millones de dólares, un múltiplo de 25 veces el beneficio en efectivo del año pasado, claramente en la cresta del ciclo tras las perturbaciones y las subidas de precios provocadas por la pandemia. ¿Hay que arriesgarse a extrapolar un año tan excepcional?
Hace veinte años, habría sido fácil justificar un múltiplo semejante para Intel. Los veteranos recordarán el aplastante monopolio tecnológico en el que se apoyaba la empresa estadounidense. A primera vista, nada podía obstaculizar el dominio del todopoderoso "Intel Inside". Sin embargo, sabemos lo que ocurrió después, y eso sin ningún ruido de fondo.
Taiwan Semiconductor Manufacturing Co Ltd es una empresa con sede en Taiwán dedicada principalmente a la prestación de servicios de fabricación de circuitos integrados. Los servicios de fabricación de circuitos integrados incluyen tecnología de procesos, tecnología de procesos especiales, apoyo al ecosistema de diseño, tecnología de máscaras, embalaje avanzado 3DFabricTM y servicios de tecnología de apilamiento de silicio. La empresa ha completado la transferencia y la producción en masa de la tecnología de 5nm, y se dedica a la investigación y el desarrollo de la tecnología de proceso de 3nm y de 2nm. La gama de aplicaciones de los productos abarca toda la industria de aplicaciones electrónicas, incluidos los ordenadores personales y los productos periféricos, los productos de aplicaciones informáticas, los productos de sistemas de comunicación por cable e inalámbricos, los servidores y los centros de datos.