FRÁNCFORT, 20 jun (Reuters) - Los bancos en la sombra están creciendo rápidamente en toda la zona del euro y representan un riesgo cada vez mayor para todo el sistema financiero, lo que exige al sector financiero ser más estricto a la hora de tratar con este tipo de entidades, dijo el supervisor del Banco Central Europeo, Andrea Enria.

Los bancos en la sombra, como los fondos de inversión o las empresas de seguros, tienen ahora 31 billones de euros (33,9 billones de dólares) en activos, lo que equivale al 80% del sector bancario supervisado, pero su regulación es más laxa y a menudo asumen apuestas más arriesgadas.

"Los riesgos entre los intermediarios financieros no bancarios podrían intensificarse en los próximos meses a medida que la política monetaria continúe su esfuerzo por devolver la inflación a su objetivo", dijo Enria el martes, argumentando que los riesgos se han acumulado "profundamente".

El apalancamiento ha aumentado considerablemente entre los bancos en la sombra, existe un gran desajuste en la duración de sus activos y pasivos, y hay pruebas de una preparación insuficiente para hacer frente a una gran demanda de liquidez, advirtió Enria.

La preocupación es que los bancos en la sombra han permanecido en gran medida sin regulación y se ha permitido que los riesgos crezcan en gran medida sin control, advirtió Enria.

Pero los bancos en la sombra están estrechamente relacionados con el sector bancario, más regulado, por lo que las tensiones allí podrían extenderse a los bancos más tradicionales, lo que obligaría a los bancos a gestionar activamente el riesgo de los clientes.

"La financiación de las entidades no bancarias es posiblemente uno de los canales de contagio más significativos desde la perspectiva del riesgo sistémico, dado que las entidades no bancarias mantienen sus reservas de liquidez principalmente como depósitos en los bancos e interactúan en los mercados de 'repos' con los bancos", afirmó Enria.

Los bancos en la sombra también suelen tratar con un pequeño grupo de bancos de importancia sistémica, por lo que sus tensiones probablemente afectarían a algunos de los principales bancos europeos.

Aunque lo ideal sería una nueva regulación, lleva tiempo negociarla y aplicarla, lo que deja a los bancos vulnerables a corto plazo.

Así que, por ahora, la salvaguarda más importante es que los bancos sean conscientes de los riesgos y los gestionen activamente cuando traten con bancos en la sombra, dijo Enria.

"El mensaje clave es que esperamos que las entidades vayan más allá del mero cumplimiento de los requisitos normativos a la hora de diseñar sus planteamientos", afirmó Enria.

(1 dólar estadounidense = 0,9151 euros)

(Información de Balazs Koranyi; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)