En la demanda presentada la semana pasada, el IBAMA dijo que solicitaba una indemnización por daños y perjuicios para remediar los problemas medioambientales y de salud humana derivados del uso de un producto tan tóxico.
Syngenta no hizo comentarios de inmediato.
IBAMA dijo a un juez federal de Sao Paulo que había encontrado pruebas del uso de una sustancia cancerígena llamada "bronopol" en niveles casi tres veces superiores a la cantidad autorizada en la fabricación del insecticida "Engeo Pleno".
Esa sustancia también se añadió ilegalmente a los insecticidas "Karate Zeon 250 CS" y "Karate Zeon 50 CS", pero no forma parte de su fórmula, según las alegaciones del IBAMA.
Syngenta habría producido 4,7 millones de litros de estos tres insecticidas, de los que al menos 4,4 millones fueron comercializados, según las pruebas aportadas por el organismo y presentadas ante el tribunal.
El IBAMA estima que la venta de los productos supuestamente adulterados generó más de 400 millones de reales (73 millones de dólares) para la empresa.
La agencia también ha pedido al juez que obligue a la empresa a identificar, recoger y eliminar adecuadamente los productos vendidos que aún no han sido retirados del mercado.
Los tribunales aún no han tomado ninguna decisión.
El valor de la indemnización se determinará en el curso del procedimiento, según los documentos judiciales.
Para garantizar el pago de las indemnizaciones en caso de que IBAMA gane el caso, el organismo ha pedido al tribunal que exija a la empresa que reserve 90 millones de reales.
(1$ = 5,4849 reales) (Reportaje de Ricardo Brito, redacción de Ana Mano Edición de Alistair Bell y David Gregorio)
