Se espera que la Cámara Baja de Brasil dé su voto final sobre las largamente esperadas reglas fiscales del gobierno en agosto, frustrando las expectativas de que esta etapa concluiría esta semana, dijo el jueves el patrocinador de la propuesta, Claudio Cajado.

En una entrevista con Reuters, el legislador Cajado afirmó que el aplazamiento se produciría debido al esfuerzo concentrado para votar la reforma de los impuestos sobre el consumo, otra prioridad del gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.

La perspectiva de un retraso en la votación, de la que ya se había hecho eco la prensa local, contribuyó a una caída del 1,6% del real brasileño frente al dólar estadounidense y del 1,78% en la bolsa brasileña.

Según Cajado, es "comprensible" que la

reforma fiscal

haya tenido prioridad, dada la presencia de varios gobernadores, alcaldes y representantes del sector productivo en Brasilia, todos esforzándose por llegar a un acuerdo definitivo sobre un tema que ha eludido cambios exitosos por parte de administraciones anteriores.

Las

nuevas reglas fiscales

que pretenden evitar el crecimiento descontrolado de la deuda pública después de que Lula consiguiera la aprobación del Congreso para aumentar los gastos sociales, ya habían sido aprobadas por la Cámara Baja este año. Sin embargo, el Senado introdujo entonces algunos cambios en el texto, provocando la necesidad de los legisladores de una nueva ronda de votaciones.

Cajado también dijo que la votación sobre un cambio en las

las reglas del juicio fiscal

, considerada crucial por el equipo económico de Lula para equilibrar el presupuesto del país, también es probable que se posponga hasta agosto, otro revés para el gobierno que esperaba votar el texto esta semana. (Reportaje de Ricardo Brito; Redacción de Marcela Ayres; Edición de Marguerita Choy)