La decisión de detener las exportaciones a través del gasoducto East Mediterranean Gas (EMG) se produce mientras se intensifican los combates entre Israel y los militantes en la Franja de Gaza.
El gasoducto EMG va desde la ciudad meridional israelí de Ashkelon, situada a unos 10 kilómetros al norte de Gaza, hasta El-Arish, en Egipto, donde conecta con un gasoducto terrestre.
El gasoducto, de 90 kilómetros de longitud, es el principal enlace entre el yacimiento de gas marino Leviatán, explotado por Chevron, y Egipto.
Chevron decidió desviar el gas debido a preocupaciones de seguridad como consecuencia del conflicto militar, dijeron dos fuentes de la industria.
El Ministerio de Energía israelí confirmó en una declaración a Reuters que Chevron había solicitado exportar gas a través de un gasoducto alternativo que une Leviathan con Jordania y también con Egipto, conocido como el Gasoducto Árabe.
El lunes, Israel suspendió la producción en el yacimiento de gas de Tamar, frente a su costa meridional, tres días después de que estallara la violencia tras un ataque sorpresa de militantes de Hamás en la franja de Gaza contra Israel.
Chevron no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.
Por otra parte, fuentes de la industria energética afirmaron que la cantidad de gas exportado desde el gigantesco yacimiento israelí de Leviatán a Egipto se ha reducido ligeramente al priorizarse el suministro al mercado nacional, pero sigue estando cerca de la cuota.
Leviathan lleva varias semanas exportando a Egipto volúmenes superiores a los comprometidos en los acuerdos de venta, dijeron las fuentes.
"Cada molécula que exportamos, primero comprobamos que no se necesita en el mercado israelí", dijo una de las fuentes.