Testigos confirmaron explosiones en todo Yemen, diciendo que las incursiones tuvieron como objetivo una base militar adyacente al aeropuerto de Sanaa, un sitio militar cerca del aeropuerto de Taiz, una base naval Houthi en Hodeidah y sitios militares en la gobernación de Hajjah.
"Estos ataques selectivos son un mensaje claro de que Estados Unidos y nuestros socios no tolerarán ataques contra nuestro personal ni permitirán que actores hostiles pongan en peligro la libertad de navegación", declaró el presidente estadounidense, Joe Biden.
Los Houthis dijeron que cinco de sus combatientes habían muerto en un total de 73 ataques aéreos y afirmaron que tomarían represalias por los ataques y continuarían con sus ataques a la navegación, que describen como destinados a apoyar a los palestinos contra Israel.
Un funcionario estadounidense dijo que más de una docena de localidades fueron blanco de ataques que no eran sólo simbólicos sino que pretendían debilitar las capacidades militares de los Houthis.
"Perseguíamos una capacidad muy específica en lugares muy concretos con municiones de precisión", dijo el funcionario.
Kheloud, una residente de la capital, Sanaa, que sólo dio su nombre de pila, se despertó con fuertes explosiones procedentes de la dirección del aeropuerto, al norte: "Vimos un gran incendio desde donde se produjo el ataque. Fue media hora de terror".
En un país que apenas acaba de salir de casi una década de guerra que llevó a millones de personas al borde de la hambruna, la mañana trajo largas colas en las gasolineras de gente que teme que se extienda un nuevo conflicto con Occidente.
"Hay mucha preocupación por que se repita la escasez de combustible y escaseen los suministros de alimentos", dijo Ali Ahmad, de 52 años. "Nos estamos apresurando a repostar nuestro coche y hemos comprado harina y arroz por si surge alguna emergencia porque esperamos que los Houthis respondan y se produzca una escalada".
En el principal puerto yemení del Mar Rojo, Hodeidah, un residente que sólo dio su nombre de pila, Mahmoud, dijo que las tropas se estaban extendiendo por las calles y que los vehículos militares estaban saliendo de los cuarteles con escoltas de seguridad.
El ministerio de Defensa británico dijo que los primeros indicios apuntaban a que "la capacidad de los Houthis para amenazar la navegación mercante ha recibido un golpe". James Heappey, ministro de Defensa subalterno no se planeaba ninguna otra acción por ahora.
El precio del petróleo subió bruscamente ante la preocupación de que pudieran interrumpirse los suministros. El crudo Brent subió 2 dólares.
Los Houthis, un movimiento armado que se hizo con el control de la mayor parte de Yemen en la última década, han estado atacando las rutas marítimas en la desembocadura del Mar Rojo, por donde pasa el 15% del comercio marítimo mundial en las rutas entre Europa y Asia.
Estados Unidos y sus aliados habían desplegado una fuerza naval en la zona en diciembre, y la situación se había agravado en los últimos días.
Los helicópteros estadounidenses atacaron directamente a las fuerzas Houthi por primera vez en Nochevieja, hundiendo tres embarcaciones y matando a los combatientes que intentaban subir a bordo de un barco. El martes de esta semana, Estados Unidos y Gran Bretaña derribaron 21 misiles y aviones no tripulados en lo que describieron como el mayor ataque houthi hasta la fecha, que, según dijeron, había apuntado directamente a sus buques de guerra.
Irán, que apoya a grupos armados en todo Oriente Próximo, incluidos tanto los Houthis como los militantes de Hamás que controlan Gaza, condenó los ataques estadounidenses y británicos.
El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, que se encuentra hospitalizado debido a complicaciones quirúrgicas, dijo en un comunicado que los ataques tenían como objetivo drones houthis, misiles balísticos y de crucero, radares costeros y vigilancia aérea.
TEMORES DE ESCALADA
Los ataques de los Houthi a buques comerciales han obligado a las navieras a enviar los barcos por una ruta más larga y costosa alrededor de África, lo que ha generado temores de que un nuevo brote de inflación y la interrupción de la cadena de suministro hagan descarrilar la recuperación económica mundial.
Tesla dijo el jueves que iba a cerrar su fábrica en Alemania durante dos semanas debido a los retrasos en los suministros de piezas que llegan de Asia como consecuencia de los disturbios en el Mar Rojo, el primer gran fabricante que hace un anuncio de este tipo.
Pero Washington ha tenido que sopesar su determinación de mantener abierta la ruta marítima frente al riesgo de que se extienda la guerra en la región. Los ataques fueron los primeros de Estados Unidos en territorio yemení desde 2016 y la primera vez que ataca a tal escala a los Houthis, apoyados por Irán.
"La preocupación es que esto podría escalar", dijo Andreas Krieg en el King's College de Londres.
Arabia Saudí hizo un llamamiento a la moderación y a "evitar una escalada". Los saudíes han respaldado al bando contrario en una guerra contra los Houthis durante casi una década, que últimamente se encuentra en un delicado estado de negociaciones de paz respaldadas por la ONU.
Estados Unidos también acusó a Irán de estar implicado operativamente en los ataques de los Houthi, proporcionando las capacidades militares y la inteligencia para llevarlos a cabo.
"Creemos que han estado ciertamente implicados en cada fase de esto", dijo a la prensa un alto funcionario estadounidense.
La violencia se ha intensificado en Líbano, Cisjordania ocupada por Israel, Siria e Irak en los tres meses transcurridos desde que Israel organizó un asalto militar contra Gaza.
Israel ha matado a más de 23.000 palestinos durante su operación para erradicar a Hamás, cuyos combatientes atacaron Israel el 7 de octubre, matando a 1.200 personas y apresando a 240 rehenes.
Estados Unidos tiene tropas sobre el terreno en Siria e Irak, y ya ha tomado represalias por ataques perpetrados allí por grupos respaldados por Irán. La agencia de noticias estatal iraquí citó a un asesor de su primer ministro diciendo que Occidente estaba ampliando el conflicto.
