Por Nidal al-Mughrabi

EL CAIRO, 10 may (Reuters) -Naciones Unidas advirtió el viernes de que la ayuda a la Franja de Gaza podría paralizarse en cuestión de días, ya que las tropas israelíes llevaron su guerra terrestre contra los combatientes palestinos a la abarrotada ciudad de Ráfah, un corredor de ayuda clave para la franja amenazada por la hambruna.

Los tanques israelíes tomaron la carretera principal que divide las secciones oriental y occidental de Ráfah, rodeando la parte oriental de la ciudad en un asalto que ha provocado que Washington bloquee parte de la ayuda militar a su aliado.

Residentes describieron el viernes explosiones y disparos casi constantes al este y noreste de la ciudad, en el extremo sur de la Franja de Gaza, con intensos combates entre las fuerzas israelíes, milicianos de Hamás y la Yihad Islámica.

Hamás dijo haber tendido una emboscada a tanques israelíes cerca de una mezquita en el este de la ciudad, señal de que los israelíes habían penetrado varios kilómetros desde el este hasta las afueras de la zona urbanizada.

Israel ha ordenado a los civiles que abandonen la parte oriental de Ráfah, obligando a decenas de miles de personas a buscar refugio fuera de la ciudad, hasta ahora último refugio de más de un millón de personas que huyeron de otras partes del enclave durante la guerra.

Israel afirma que no puede ganar la guerra sin asaltar Ráfah para erradicar a los miles de combatientes de Hamás que cree que se refugian allí. Hamás afirma que luchará para defenderla.

Los suministros ya escaseaban y las operaciones de ayuda podrían detenerse en cuestión de días a medida que se agoten las reservas de combustible y alimentos, según las agencias de ayuda de las Naciones Unidas.

"Durante cinco días, no ha entrado combustible ni prácticamente ayuda humanitaria en la Franja de Gaza y estamos rascando el fondo del barril", dijo Hamish Young, coordinador superior de Emergencias de UNICEF en la Franja de Gaza.

Las agencias de ayuda afirman que la batalla ya ha puesto en peligro a cientos de miles de civiles previamente desplazados.

"No es seguro, toda Ráfah no es segura porque desde ayer han caído proyectiles de tanque por todas partes", dijo a Reuters Abu Hassan, de 50 años, residente de Tel al-Sultan, al oeste de Ráfah, a través de una aplicación de mensajería.

"Estoy intentando marcharme, pero no puedo permitirme 2.000 séqueles (540 dólares) para comprar una tienda de campaña para mi familia", añadió. "Hay un creciente movimiento de personas fuera de Ráfah, incluso desde las zonas occidentales, aunque no fueron designadas como zonas rojas por la ocupación".

"El ejército está atacando toda Ráfah, no sólo el este, con proyectiles de tanques y ataques aéreos".

Los tanques israelíes ya han sellado el este de Ráfah desde el sur, capturando y cerrando el único cruce entre el enclave y Egipto. Un avance el viernes hacia la carretera de Saladino que divide la Franja de Gaza completó el cerco de la "zona roja", donde han ordenado salir a los residentes.

"En el transcurso de los últimos tres días, aproximadamente, la situación se ha deteriorado de forma increíblemente dramática en Ráfah", dijo James Smith, médico británico de urgencias que trabaja como voluntario en el Hospital Europeo, al norte de Ráfah.

"El número de ataques aéreos ha aumentado. El número de ataques de artillería ha aumentado y hemos oído que equipos militares pesados, tanques y demás, han estado en las calles del este de Ráfah y también en el paso fronterizo de Ráfah con Egipto", dijo en un mensaje de voz reenviado a Reuters por un colega.

"Todos los convoyes de ayuda humanitaria llevan un par de días sin poder pasar a Gaza desde el sur. No ha entrado combustible y la ONU ya está planeando los peores escenarios, racionando el combustible sólo para las actividades esenciales".

El ejército israelí dijo que sus fuerzas en el este de Ráfah habían localizado varios pozos de túneles y que tropas respaldadas por un ataque aéreo luchaban cuerpo a cuerpo con grupos de combatientes de Hamás, matando a varios.

Los aviones israelíes alcanzaron varios lugares desde los que se habían disparado cohetes y morteros contra Israel en los últimos días, incluido el paso fronterizo de Kerem Shalmon.

'LUCHAR CON LAS UÑAS'

La perspectiva de un asalto total a Ráfah esta semana ha abierto una de las mayores brechas durante generaciones entre Israel y su aliado más cercano, Estados Unidos, que ha bloqueado los envíos de armas a Israel por primera vez desde que comenzó la guerra.

El primer ministro, Benjamin Netanyahu, dijo el jueves que Israel "lucharía con las uñas" si fuera necesario. En una entrevista en la televisión estadounidense, dijo que esperaba que Israel superara sus desacuerdos con el presidente Joe Biden.

La operación israelí de Ráfah ha bloqueado las entregas de ayuda a través de los dos puestos de control del sur de Gaza, incluido el único paso desde Egipto y el cercano Kerem Shalom desde Israel. Israel ha dicho que ha reabierto Kerem Shalom, pero las agencias de ayuda afirman que no han podido hacer pasar los suministros.

En Jerusalén Este, la principal agencia de la ONU para los palestinos, UNRWA, cerró un complejo el viernes después de que manifestantes israelíes prendieran fuego a parte de sus instalaciones.

Las conversaciones de alto el fuego también se interrumpieron el jueves sin que se llegara a un acuerdo para detener los combates y liberar a los rehenes capturados en los atentados del 7 de octubre dirigidos por Hamás que precipitaron la guerra.

Hamás había manifestado a principios de semana su acuerdo con una propuesta presentada por mediadores qataríes y egipcios que Israel había aceptado previamente. Israel dijo que la propuesta de Hamás contenía elementos que no puede aceptar.

Más de 34.000 gazatíes han muerto en los siete meses de guerra, según las autoridades sanitarias del enclave controlado por Hamás, que afirman que es probable que haya miles de muertos más enterrados bajo los escombros. Israel lanzó el asalto para aniquilar a Hamás tras los ataques del 7 de octubre, en los que murieron 1.200 personas según los recuentos israelíes.

(1 dólar estadounidense = 3,7231 séqueles)

(Información adicional de James Mackenzie en Jerusalén y Maggie Fick; escrito por Peter Graff; edición de Andrew Heavens; editado en español por Mireia Merino y Benjamín Mejías Valencia)