Los datos del Departamento de Trabajo de EE.UU. mostraron el miércoles que las solicitudes iniciales de subsidio por desempleo aumentaron en 238.000 la semana que finalizó el 29 de junio, ligeramente por encima de las expectativas e indicando una suavización de las condiciones del mercado laboral.
El indicador MSCI de valores de todo el mundo subió un 0,71% hasta los 812,52 puntos, mientras que el amplio índice europeo STOXX 600 sumó un 0,74%.
"Tenemos una ralentización del crecimiento pero más cercana a la tendencia, con la posibilidad de que la Fed empiece a recortar los tipos quizá en septiembre, y unos beneficios que han seguido siendo bastante buenos, eso es un telón de fondo bastante bueno todavía", dijo Jack Janasiewicz, estratega jefe de carteras de Natixis Investment Managers en Boston.
Los responsables de la Fed reconocieron en su última reunión que la economía estadounidense parecía estar ralentizándose y que "las presiones sobre los precios estaban disminuyendo", pero aún así aconsejaron un enfoque de esperar y ver antes de comprometerse a recortar los tipos de interés, según las actas de la sesión de dos días celebrada los días 11 y 12 de junio que se publicaron el miércoles.
En Wall Street, los índices de referencia S&P 500 y Nasdaq alcanzaron nuevos máximos de cierre, con los valores tecnológicos, de servicios públicos y de materiales entre los que más subieron. Los valores del sector sanitario empujaron al Dow a terminar a la baja. El Promedio Industrial Dow Jones cayó un 0,06% hasta 39.308,00, el S&P 500 ganó un 0,51% hasta 5.537,02 y el Nasdaq Composite ganó un 0,88% hasta 18.188,30. El índice dólar, que mide el billete verde frente a una cesta de divisas que incluye el yen y el euro, cayó un 0,26% hasta 105,39, y el euro subió un 0,34% hasta 1,078 dólares. "Desde una perspectiva de estacionalidad, las dos primeras semanas de julio tienden a ser buenas y estamos siguiendo más o menos esos patrones estacionales en el sentido de que las cifras económicas siguen apuntando a una desaceleración de la economía, no a una economía lenta, y todo lo demás sigue siendo bastante favorable aquí", añadió Janasiewicz.
Los rendimientos del Tesoro a 10 años de referencia cayeron tras los datos de solicitudes de subsidio de desempleo, así como tras los signos de debilidad en el sector manufacturero, ya que el índice ISM no manufacturero se situó por debajo de las expectativas. El rendimiento de los bonos estadounidenses de referencia a 10 años cayó 8,1 puntos básicos, hasta el 4,355%. El índice dólar, que mide la cotización del billete verde frente a una cesta de divisas entre las que se encuentran el yen y el euro, cayó un 0,26% hasta los 105,40, mientras que el euro subió un 0,34% hasta los 1,078 dólares. El yen se hundió a un nuevo mínimo de 38 años frente al dólar estadounidense y a un mínimo histórico frente al euro antes de la festividad del 4 de julio en Estados Unidos. El yen cayó a 161,96 por dólar por primera vez desde diciembre de 1986. Los precios del petróleo subieron alrededor de un 1% tras un descenso mayor de lo esperado de las existencias de crudo en Estados Unidos, pero las ganancias se vieron limitadas por la preocupación por el aumento de los inventarios mundiales en unas operaciones poco intensas previas a la festividad del Día de la Independencia en Estados Unidos.
Los futuros del crudo Brent subieron un 1,3% para establecerse en 87,34 $ el barril. Los futuros del crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) ganaron un 1,3% para situarse en 83,88 dólares.
El precio del oro subió más de un 1% y alcanzó máximos de casi dos semanas, al debilitarse el dólar estadounidense. El oro al contado sumó un 1,13% hasta los 2.355,62 $ la onza, mientras que los futuros del oro estadounidense ganaron un 1,66% hasta los 2.361,60 $ la onza.
