"La base de nuestro régimen es la remuneración de las reservas", declaró el viernes Andrew Hauser, director ejecutivo de mercados del BoE, en una conferencia sobre banca central organizada por el King's College de Londres.

"Si no remuneráramos las reservas, los tipos (de interés del mercado) caerían por debajo del tipo bancario. Y en un momento en el que estamos intentando bajar la inflación, eso sería incómodo".

Los responsables políticos del Banco Central Europeo están revisando los intereses que el BCE paga por los depósitos en efectivo de los gobiernos, incluyendo un posible recorte, para intentar frenar las crecientes pérdidas derivadas de su lucha contra la inflación, según declararon dos fuentes a Reuters esta semana.

El primer ministro británico, Rishi Sunak, dijo en 2021, cuando era ministro de Finanzas, que los cambios en la remuneración de las reservas de efectivo que los bancos mantienen en el BdE perjudicarían su eficacia. Ha prometido a los votantes reducir la inflación a la mitad este año.

Pero las especulaciones sobre posibles cambios han persistido dado el ahorro potencial para el gobierno de decenas de miles de millones de libras si los bancos recibieran intereses por sólo una fracción de sus depósitos en el BoE.

Los bancos británicos poseen alrededor de 800.000 millones de libras de reservas en el BoE, en gran parte como resultado de las compras de bonos de flexibilización cuantitativa del banco central que ahora está revirtiendo.

Los bancos reciben intereses por las reservas al tipo de interés de referencia vigente del BoE, que a finales de 2021 era de sólo el 0,1% anual, pero que ahora se sitúa en el 5,25%.