A las 1138 GMT, la libra subía un 0,24% frente al dólar y cotizaba a 1,2578 dólares.
El BoE se reunirá el jueves para celebrar su última reunión de política monetaria de 2023. Los participantes en el mercado esperan en general que no haya cambios en el actual tipo de interés bancario, que se sitúa en el 5,25%, su nivel más alto en 15 años.
La atención del mercado se ha desplazado en las últimas semanas a cuándo recortará el Banco de Inglaterra el tipo de interés bancario. Los operadores esperan que el banco central británico recorte los tipos a un ritmo más lento que la Reserva Federal estadounidense.
Stuart Cole, macroeconomista jefe de Equiti Capital, dijo que la subida de la libra del lunes puede atribuirse en parte a este tema subyacente de que el diferencial de tipos de interés del cable con EE.UU. parece que se ampliará a lo largo del próximo año.
"...en segundo lugar, creo que existe cierta preocupación en el mercado de que el Banco de Inglaterra utilice la reunión del Comité de Política Monetaria de esta semana para dar marcha atrás en la relajación que hemos estado viendo en los mercados", dijo Cole.
En cuanto a los datos, el martes se publicarán los datos del mercado laboral británico, a los que seguirán los datos del PIB el miércoles, lo que proporcionará al mercado una lectura importante sobre el estado de la economía del Reino Unido.
Simon Harvey, jefe de análisis de divisas de Monex, dijo que su equipo espera que los datos de esta semana confirmen la postura del Banco de Inglaterra de tipos más altos durante más tiempo, con unos datos de crecimiento que probablemente muestren una leve contracción en relación con la zona euro, y unos datos sobre el mercado laboral que muestren que las presiones salariales siguen siendo elevadas.
"Para la GBPUSD, es poco probable que esto suponga un cambio de juego, centrándose en cambio en la dinámica del dólar dada la publicación del IPC estadounidense el martes y las nuevas proyecciones económicas de la Fed el miércoles", dijo Harvey de Monex.
En otros lugares, el organismo de comercio manufacturero Make UK dijo el lunes que las fábricas británicas en dificultades están viendo algunos signos de recuperación, ayudadas por un estallido de reabastecimiento largamente esperado y un repunte en los pedidos de exportación que podría ayudar al sector en un desafiante 2024.
