El ánimo de los consumidores británicos alcanzó su nivel más alto desde enero de 2022, ya que los hogares se vuelven más optimistas sobre sus finanzas y su economía, a pesar de la obstinada inflación y la subida de los tipos de interés, según informó el viernes la empresa de estudios de mercado GfK.

El índice general de confianza de GfK subió por quinto mes consecutivo a -24 en junio desde -27 en mayo, alejándose aún más del mínimo histórico de -49 registrado el pasado septiembre, cuando el plan económico de la ex primera ministra Liz Truss causó agitación en los mercados financieros.

La subida de junio superó la previsión de -26 realizada en una encuesta de Reuters entre economistas.

Aunque la inflación británica de los precios al consumo se ha suavizado desde el máximo de 41 años del 11,1%, los hogares siguen lidiando con la tasa de inflación más alta entre las principales economías ricas, con un 8,7% en mayo, sin cambios desde abril.

Sin embargo, Joe Staton, director de estrategia de clientes de GfK, afirmó que los consumidores estaban mostrando una "notable resistencia" ante unas subidas de precios que han resultado ser más duraderas de lo que se pensaba en un principio.

"Si los consumidores siguen capeando el temporal económico actual, esto proporcionará una base firme para volver al crecimiento", afirmó Staton.

La economía británica ha evitado hasta ahora las previsiones de recesión y la medida de GfK sobre cómo ven los consumidores la economía en los próximos 12 meses aumentó hasta -25 desde -30 en mayo, mientras que los sentimientos sobre sus finanzas personales subieron siete puntos hasta -1.

Sin embargo, algunos economistas han afirmado que el Banco de Inglaterra, que subió los tipos de interés 50 puntos básicos más de lo esperado el jueves, hasta el 5%, corre el riesgo de provocar una recesión, algo que el gobernador del BoE, Andrew Bailey, afirmó que el banco central quiere evitar.

GfK dijo que tres medidas del sentimiento de los consumidores subieron en junio en comparación con el mes anterior, cuando los cinco indicadores subieron. La disposición de los compradores a realizar compras caras cayó, mientras que su indicador de intenciones de ahorro subió.

GfK encuestó a 2.000 personas entre el 1 y el 14 de junio. (Reportaje de Suban Abdulla; edición de David Milliken)