Bielorrusia, estrecho aliado de Rusia, es el único país de Europa que sigue aplicando la pena de muerte. Existe para delitos como el asesinato o para actos de terrorismo.

Las ejecuciones se llevan a cabo con un único disparo en la nuca.

La nueva ley forma parte de los cambios introducidos en el código penal para reforzar la lucha de Bielorrusia contra los "delitos de orientación extremista (terrorista) y antiestatal".

Según otro cambio aprobado por Lukashenko el jueves, cualquier persona declarada culpable de "desacreditar" a las fuerzas armadas bielorrusas se enfrentará a una pena de cárcel. Rusia aprobó una ley similar tras invadir la vecina Ucrania hace poco más de un año.

Bielorrusia no ha enviado tropas propias a Ucrania, pero permitió que Rusia utilizara su territorio como plataforma de lanzamiento de su operación en febrero de 2022 y, desde entonces, ha dejado que aviones de guerra y drones rusos utilicen su espacio aéreo para atacar Ucrania.