Sovcombank, una de las 13 "instituciones de crédito de importancia sistémica" de Rusia, se vio afectada por las sanciones occidentales en respuesta al envío por Moscú de decenas de miles de tropas a Ucrania el pasado mes de febrero, lo que paralizó su acceso a determinados mercados y creó quebraderos de cabeza a los tenedores de bonos.

El accionista, Sovco Capital Partners, espera recomprar cuatro emisiones, todas ellas denominadas en dólares estadounidenses y con vencimiento en 2030.

"Aunque las sanciones prescriben que los inversores detengan cualquier interacción con nosotros, cancelando de hecho todas las inversiones a cero, estamos tratando de encontrar compromisos más razonables con los propietarios de cualquiera de nuestras emisiones, que están dispuestos a mantener el diálogo", dijo Khotimsky.

"Estamos hablando de un precio de alrededor del 40% del valor nominal, que corresponde a los niveles de precios de mercado de los bonos rusos en infraestructuras extranjeras", dijo, añadiendo que los inversores en activos rusos y los rusos que poseen activos en el extranjero habían sufrido todos a causa de las sanciones.

Los inversores extranjeros de países que Rusia considera poco amistosos se están deshaciendo con éxito de tenencias de deuda local por valor de miles de millones de rublos, vendiendo los bonos del Tesoro OFZ del gobierno con un fuerte descuento, según declararon a Reuters el mes pasado dos fuentes del mercado financiero.