El banco central subió los tipos hasta el 13% este mes, ya que la debilidad del rublo se sumó a las ya obstinadas presiones inflacionistas derivadas de los elevados préstamos al consumo, la escasez de mano de obra y un amplio déficit presupuestario.

El director financiero del VTB, Dmitry Pyanov, declaró que hasta ahora los tipos altos no habían tenido prácticamente ningún impacto en los ingresos netos por intereses del VTB, pero que eso cambiaría en los próximos meses.

"Tenemos unos 15.000 millones de rublos de caída de los ingresos por intereses por cada punto porcentual de aumento del tipo de interés básico", dijo Pyanov a los periodistas. "En esta situación, se puede calcular qué tipo de ingresos decrecientes tendremos".

VTB espera unos beneficios récord de 420.000 millones de rublos este año, recuperándose de una enorme pérdida neta inducida por las sanciones en 2022, después de que Rusia enviara tropas a Ucrania.

"Nada nos impedirá terminar 2023 con cifras récord", dijo Pyanov. "Es sólo que en agosto-septiembre se inició una era diferente en lo que respecta al tipo clave.

"Está claro que los beneficios del sector bancario en 2024 serán muy inferiores a los de 2023".

El VTB espera que el Banco de Rusia siga endureciendo la política monetaria, elevando el tipo clave al 14% a finales de año. Los analistas de la agencia de calificación Expert RA prevén unos beneficios del sector bancario de más de 3 billones de rublos en 2023.

Los bancos rusos se han recuperado tras el golpe inicial que supusieron las sanciones del año pasado contra Moscú, y los prestamistas compiten ahora por el negocio del Estado, en particular por un presupuesto de defensa floreciente, y por las grandes cuentas corporativas del país.

Las provisiones del VTB se duplicaron con creces en agosto, en comparación con julio, con unos 13.000 millones de rublos destinados a una provisión única sobre un prestatario extranjero sin nombre.

Pyanov dijo que el prestatario de un país "amigo" había reembolsado su deuda en una divisa "no amiga" con un pequeño descuento, sin revelar detalles. Rusia considera poco amistosos a los países que impusieron sanciones.

"Tenemos que resolver problemas de préstamos específicos cuyo servicio es difícil debido al régimen de sanciones", dijo Pyanov. "Se trata de una operación puntual, atípica, y no vemos otros casos semejantes en el horizonte".