El viceministro de Defensa, Alexander Fomin, se comprometió tras las conversaciones entre las delegaciones de ambos países en Estambul.

"Con el fin de aumentar la confianza mutua y crear las condiciones necesarias para seguir negociando y lograr el objetivo final de acordar y firmar (un) acuerdo, se tomó la decisión de reducir radicalmente, en gran medida, la actividad militar en las direcciones de Kiev y Chernihiv", dijo Fomin a los periodistas.

No se refirió a las zonas del este y el sur de Ucrania, donde las fuerzas rusas también están llevando a cabo importantes ofensivas pero han tenido dificultades para avanzar.

El negociador jefe de Rusia, Vladimir Medinsky, dijo que este era uno de los dos pasos que Moscú estaba dando para desescalar el conflicto de 34 días.

Dijo que la otra era que Rusia aceptaría una reunión entre los presidentes Vladimir Putin y Volodymyr Zelenskiy que tendría lugar simultáneamente si sus ministros de exteriores rubricaban un tratado de paz.

Anteriormente, Moscú había dicho que una reunión presidencial sólo podría tener lugar en un momento posterior.

Los negociadores ucranianos dijeron que habían propuesto en la última ronda de conversaciones con Rusia que Ucrania adoptara un estatus neutral a cambio de garantías de seguridad, lo que significa que Kiev no se uniría a alianzas militares ni albergaría bases militares.

Dijo Medinsky: "Estas propuestas serán consideradas en un futuro próximo, se informará al presidente (Putin) y se dará nuestra respuesta".

Fomin dijo que Rusia también había pedido a Ucrania que eliminara lo que llamó tortura de los prisioneros rusos capturados.

Ucrania comprueba toda la información relativa al tratamiento de los prisioneros y tomará las medidas legales oportunas si los soldados son declarados culpables de cualquier violación, dijo el martes el jefe adjunto del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania.