La Bolsa de París (-3% hasta 7.475) ha sufrido una fuerte caída por segunda sesión consecutiva (la 4ª de un total de 5), con un retroceso del 5% en 48 horas. El índice está sufriendo su mayor corrección semanal desde finales de febrero de 2022, con un marcador cercano al -6%, en un contexto de incertidumbre política y dudas sobre los tipos de interés.

El Euro-Stoxx50 (-1,9%) destrozó el nivel de soporte de los 4.900 y perdió un 4,2% en la semana, que también se perfila como la peor desde hace 27 meses. Wall Street reabrió con un descenso moderado, con el S&P500 perdiendo un 0,3% y situándose en torno a los 5.

420pts, que sube un 1,6% en la semana (+14% desde el 1 de enero), y un Nasdaq (sin cambios) que bien podría subir 5/5, con una ganancia semanal del 3,1%, lo que representa un diferencial histórico de casi el 9% con el CAC40, un resultado sin precedentes en una sola semana en el siglo XXI.


Golpeado duramente por los resultados de las elecciones europeas y el anuncio de la disolución de la Asamblea Nacional, el mercado parisino se encuentra en números rojos desde el 1 de enero (-0,2%). Los mercados temen que la incertidumbre que rodea al resultado de las próximas elecciones legislativas, con la posible llegada al poder del RN (o, como admiten muchos estrategas, en el peor de los casos, la versión del "Frente Popular" de 2024), lleve a los inversores a mantenerse alejados de la renta variable francesa durante varios meses.



Ya debilitado por la rebaja de la calificación de Francia por parte de S&P, el rendimiento de la deuda pública francesa a 10 años ha subido más de 25 puntos básicos desde el domingo, hasta el 3,16%. Durante la última semana, el diferencial con Alemania se ha ampliado bruscamente hasta casi 80 puntos básicos (+77 puntos básicos en 5 sesiones), lo que ilustra la desconfianza de los inversores.
Nuestras OAT han bajado 1 punto básico, hasta el 3,1700%, y los Bunds han bajado 14,5 puntos básicos, hasta el 2,35%: es un verdadero viento de pánico el que sopla sobre nuestras emisiones; las emisiones más "comparables", los BTP italianos, han bajado 2,5 puntos básicos, hasta el 3,92%, y tienen una prima de 20 puntos básicos sobre los Bunds.



Esperamos que la campaña electoral provoque cierto nerviosismo en los mercados bursátiles, pero nada demasiado grave ni duradero, en nuestra opinión", modera Christopher Dembik, asesor de estrategia de inversión de Pictet AM. "La lección que podemos extraer de los últimos años es que nunca debemos exagerar la influencia de la política en el comportamiento a medio plazo de los mercados financieros de los países desarrollados (por ejemplo, Brexit, Trump, etc.)", añade el analista.



La historia reciente nos ha enseñado que la volatilidad en los mercados de renta fija europeos suele ser efímera", añade Guillaume Truttman, gestor de Eiffel Investment Group. Sin embargo, el profesional no puede evitar establecer un paralelismo con la crisis de deuda que sacudió la eurozona entre 2011 y 2013.

Lo que puede parecer una apuesta por parte de Emmanuel Macron alimenta ahora una incertidumbre política que, en el pasado, dejó malos recuerdos entre los inversores europeos cuando el riesgo de fragmentación de la eurozona era agudo", recuerda.

A esto se añaden los temores sobre la trayectoria de la política monetaria de la Fed, que podría traducirse en menos recortes de tipos de los esperados en los próximos meses.



El único motivo de satisfacción esta semana es que las últimas estadísticas muestran que la inflación está mejor controlada en Estados Unidos, lo que refuerza el escenario de un "aterrizaje suave" de la economía estadounidense este verano. Las cifras de los precios de importación cayeron un 0,4% en mayo con respecto al mes anterior (y se mantienen perfectamente estables excluyendo los productos petrolíferos).



Al mismo tiempo, los precios de exportación cayeron un 2,1% (y un -2,1% excluyendo los alimentos), según el Departamento de Trabajo. En 12 meses, es decir, entre mayo de 2023 y mayo de 2024, los precios de importación estadounidenses subieron un 1,1% (+0,5% excluyendo los productos petrolíferos) y los precios de exportación subieron un 0,6% (+1,5% excluyendo los alimentos).


Los T-Bonds estadounidenses aprovecharon la coyuntura para relajarse -3,2 puntos hasta el 4,208%, es decir, -22 puntos básicos en la semana. En Francia, los precios al consumo se mantuvieron estables en mayo de 2024 y subieron un 2,3% en un año (tras el 2,2% de abril de 2024), según el INSEE.



Esta ligera subida de la inflación es el resultado de una nueva aceleración en un año de los precios de la energía (+5,7% tras +3,8%) ligada a un efecto de base sobre el precio de los productos petrolíferos (+2,9% tras -0,7%), según el Insee. Por último, el euro ha bajado un -0,6% frente al dólar (1,0680) y ha perdido un 2% en la semana. Copyright (c) 2024 CercleFinance.com. Todos los derechos reservados.