El BRICS, que ahora está formado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, está considerando ampliar su número de miembros, y un número creciente de países, en su mayoría del Sur global, han expresado su interés en unirse.

Considerado en su día como una asociación laxa de economías emergentes dispares, el BRICS ha tomado en los últimos años una forma más concreta, impulsado inicialmente por China y, desde el inicio de la guerra de Ucrania en febrero de 2022, con el ímpetu añadido de Rusia.

En su discurso de apertura de los debates del viernes, la ministra de Asuntos Exteriores de Sudáfrica, la anfitriona, Naledi Pandor, se refirió al bloque como un defensor del mundo en desarrollo, que según ella fue abandonado por los estados ricos y las instituciones mundiales durante la pandemia del COVID-19.

"El mundo ha flaqueado en la cooperación. Los países desarrollados nunca han cumplido sus compromisos con el mundo en desarrollo e intentan trasladar toda la responsabilidad al Sur global", afirmó Pandor.

Irán, Arabia Saudí, los Emiratos Árabes Unidos, Cuba, la República Democrática del Congo, Comoras, Gabón y Kazajstán enviaron representantes a Ciudad del Cabo para las conversaciones de los llamados "Amigos de los BRICS", según mostró un programa oficial.

Egipto, Argentina, Bangladesh, Guinea-Bissau e Indonesia participaban virtualmente.

China, el peso pesado de los BRICS, dijo el año pasado que quería que el bloque pusiera en marcha un proceso para admitir a nuevos miembros. Y otros miembros han señalado países que les gustaría que se unieran al club.

Sin embargo, los funcionarios dijeron el jueves que aún quedaba trabajo por hacer y parecieron conscientes de la necesidad de proceder con cautela.

"El BRICS es una historia de éxito", dijo el ministro de Asuntos Exteriores brasileño, Mauro Vieira. "El grupo es también una marca y un activo, así que tenemos que cuidarlo".

El ministro indio de Asuntos Exteriores, Subrahmanyam Jaishankar, dijo que las conversaciones del jueves habían incluido deliberaciones sobre los principios rectores, las normas, los criterios y los procedimientos de lo que sería un bloque BRICS ampliado.

"Esto es todavía un trabajo en curso", añadió.

El ministerio de Asuntos Exteriores indio ha insistido anteriormente en la necesidad de una política común para dicha ampliación, en lugar de considerar las candidaturas de forma individual.

Pandor, de Sudáfrica, declaró que los ministros de Asuntos Exteriores pretendían completar el trabajo sobre un marco para la admisión de nuevos miembros antes de que los líderes de los BRICS se reúnan en una cumbre en Johannesburgo en agosto.

Los preparativos para esa cumbre avanzan bajo una nube de controversia debido a la posible asistencia del presidente ruso Vladimir Putin, sobre quien pesa una orden de detención emitida por la Corte Penal Internacional (CPI).

Como miembro de la CPI, Sudáfrica se vería presionada para detener a Putin en caso de que viajara a la cumbre.

Pretoria ha dicho que aún está considerando sus opciones legales para acoger al presidente ruso.