El Grupo Cooperativo Fonterra de Nueva Zelanda recortó el viernes su previsión de precios de la leche en granja por segunda vez este mes, en medio de la debilidad de los precios internacionales de los productos lácteos, poniendo sus acciones en camino de su peor día de la historia.

Los precios del comercio mundial de productos lácteos se sitúan de media en su nivel más bajo en casi cinco años, según una importante subasta de productos lácteos, ya que la demanda china sigue siendo débil y los volúmenes subastados han aumentado.

Fonterra espera ahora pagar entre 6,00 y 7,50 dólares neozelandeses por kilogramo de leche sólida (kgMS) para la temporada 2023-2024, por debajo de su previsión anterior de 6,25 a 7,75 dólares neozelandeses por kgMS.

Las acciones de la empresa láctea cayeron un 16% en la mayor caída intradía de su historia, mientras que el mercado en general bajó un 0,4%.

La caída de los precios de los productos lácteos ha sido también una preocupación para la economía neozelandesa, ya que el sector representa más del 7% del producto interior bruto de la nación y el país se encuentra ya en una recesión técnica.

"La reducción de la demanda de leche entera en polvo por parte de las principales regiones importadoras está lastrando los precios", declaró en un comunicado el director ejecutivo Miles Hurrell.

"Aunque hay indicios de que la demanda empezará a recuperarse en la segunda mitad del año fiscal 2024, esperamos que el ritmo de crecimiento de la demanda sea moderado en relación con las expectativas iniciales". (Reportaje de Nausheen Thusoo en Bengaluru; Edición de Anil D'Silva y Subhranshu Sahu)