Los precios del cobre se hundieron el lunes al inquietarse el mercado por los excedentes del metal industrial, el aumento de las existencias, las malas perspectivas de la demanda en China, principal consumidor, y la firmeza del dólar.

El cobre de referencia en la Bolsa de Metales de Londres (LME) bajaba un 0,4% a 8.538 dólares la tonelada a las 1039 GMT.

Los datos del Grupo Internacional de Estudios sobre el Cobre mostraron que el mercado en el periodo enero-mayo registró un excedente de 287.000 toneladas.

"El entusiasmo comprador por el cobre se ha visto atenuado por el hecho de que ahora mismo hay bastante cobre en el mercado", dijo Edward Meir, analista de la firma de corretaje Marex.

"Esperamos que un dólar más bajo y la caída de los tipos estadounidenses... ayuden al alza, al igual que podrían hacerlo el aumento de los costes mineros y los continuos problemas laborales. Sin embargo, seguimos sin ver mucha demanda procedente de China o del resto del mundo manufacturero."

La prima del cobre Yangshan < SMM-CUYP-CN>, que indica la demanda de importaciones chinas de cobre, cayó la semana pasada a 29 dólares la tonelada, el nivel más bajo desde el 18 de mayo. Se situó por última vez en 31,50 dólares, lo que supone una caída del 40% en el último mes.

Se espera que la oferta de cobre mejore en agosto, ya que muchas fundiciones reanudan la producción tras el mantenimiento estival, y también debido al aumento de los beneficios en medio de los elevados gastos de tratamiento y refinado del concentrado de cobre.

Los inventarios de cobre < MCUSTX-TOTAL> en los almacenes autorizados de la LME, de 79.325 toneladas, han subido casi un 50% desde el 12 de julio.

Desde el punto de vista técnico, la barrera alcista para el cobre se sitúa en torno a los 8.455 $, donde convergen las medias móviles de 21, 100 y 200 días.

El jueves se esperan pistas sobre la dirección del dólar con los datos de inflación, que podrían influir en las decisiones de política monetaria de la Reserva Federal estadounidense.

Sin embargo, el lunes la subida de la divisa estadounidense, que encarece las materias primas denominadas en dólares para los tenedores de otras divisas, pesó sobre los metales industriales en general.

El aluminio bajó un 0,2% a 2.228 dólares la tonelada, el zinc retrocedió un 0,4% a 2.494 dólares, el plomo subió un 1% a 2.148 dólares, el estaño apenas varió a 27.710 dólares y el níquel subió un 1,1% a 21.555 dólares. (Reportaje de Pratima Desai; edición de Barbara Lewis)