El organismo de apelaciones de planificación An Bord Pleanála dijo que había denegado el permiso para una terminal de GNL con capacidad de regasificación de hasta 22,6 millones de metros cúbicos al día y hasta 180.000 metros cúbicos de almacenamiento en el condado de Kerry, en la costa oeste de Irlanda.

El proyecto habría requerido una inversión de 650 millones de euros (694 millones de dólares), según informó la emisora estatal RTE.

El desarrollo en este momento "sería contrario a la política actual del gobierno", decía la decisión, que potencialmente podría ser impugnada ante los tribunales.

Decía que no sería apropiado permitir o proceder con el desarrollo de ninguna terminal de GNL en Irlanda a la espera de la finalización de una revisión gubernamental sobre la seguridad energética, que se publicará en las próximas semanas.

Irlanda produce actualmente algo de gas, pero se prevé que en los próximos años dependa cada vez más de los gasoductos de importación.

"Seguir generando combustibles fósiles supone el riesgo de no cumplir los objetivos para 2050, crearía un efecto de bloqueo, retrasaría la transición a una economía con cero emisiones de carbono y desplazaría la inversión en energías limpias", decía la decisión.

El organismo de planificación también rechazó los planes de una central eléctrica de gas de 600 megavatios y un sistema de almacenamiento de energía en baterías de 120 megavatios hora.

"En un momento en que el mundo arde, no podemos ampliar el uso de combustibles fósiles. Tenemos que pasar de la electricidad a la eólica", declaró a RTE el ministro irlandés de Energía, Eamon Ryan, miembro del Partido Verde.

Dijo que la próxima revisión de la seguridad energética de Irlanda podría recomendar algún uso del GNL, pero que probablemente sería "estratégico, no comercial".

(1 dólar = 0,9372 euros)