El principal índice bursátil de Canadá amplió el martes su rebote desde un mínimo de tres meses, ayudado por las ganancias de las acciones tecnológicas y de consumo discrecional, mientras los datos nacionales mostraban una relajación de las presiones inflacionistas.

El índice compuesto S&P/TSX de la Bolsa de Toronto subió 145,77 puntos, o un 0,7%, hasta los 19.733,09, sumándose a las ganancias del lunes. El viernes, el TSX registró su cierre más bajo desde mediados de marzo.

La tasa de inflación anual de Canadá se situó en el 3,4% en mayo, su ritmo más lento en dos años, lo que debilita los argumentos a favor de otra subida de los tipos de interés tan pronto como el mes que viene por parte del Banco de Canadá.

El sector tecnológico avanzó un 1,6%, siguiendo las ganancias de las acciones tecnológicas estadounidenses, mientras que el de consumo discrecional subió un 1,8%.

Las acciones de Brookfield Corp subieron un 2,7%, ya que su rama de reaseguros ofreció comprar el proveedor estadounidense de rentas vitalicias American Equity Investment Life Holding en una operación por valor de casi 4.300 millones de dólares.

Aun así, el mercado de Toronto va camino de registrar un descenso trimestral, tras dos trimestres seguidos de ganancias, ya que las inciertas perspectivas de la economía mundial presionan los precios de las materias primas. Las acciones de recursos representan alrededor del 30% de la capitalización bursátil del TSX.

El martes, el índice energético del TSX cayó un 0,3%, ya que el petróleo se situó un 2,4% por debajo, a 67,70 dólares el barril.

"Va a costar mucho hacer cambiar de opinión a los operadores del sector energético", afirmó en una nota Edward Moya, analista de mercado senior de OANDA. "Los temores a unas perspectivas de crecimiento mundial más débiles no van a desaparecer pronto". (Reportaje de Fergal Smith en Toronto y Shashwat Chauhan en Bengaluru; Edición de Shilpi Majumdar y Cynthia Osterman)