14 jun (Reuters) - El ministro de Relaciones Exteriores chino, Qin Gang, instó el miércoles a Estados Unidos a dejar de inmiscuirse en sus asuntos y de perjudicar su seguridad en una llamada telefónica con su homólogo estadounidense, un tenso anticipo de la visita de Antony Blinken a Pekín prevista para los próximos días.

Qin pidió a Blinken que respete las principales preocupaciones de China, como la cuestión de Taiwán, en un esfuerzo por frenar el declive de las relaciones entre las superpotencias, indicó la Cancillería china.

Blinken subrayó la necesidad de comunicación "para evitar errores de cálculo y conflictos" y dijo que Washington seguirá planteando a China áreas de preocupación, así como una posible cooperación, según informó el Departamento de Estado en un breve resumen de la llamada.

Está previsto que Blinken viaje a China y Reino Unido entre el 16 y el 21 de junio, informó el Departamento de Estado el miércoles, después de que un funcionario gubernamental dijera la semana pasada que Blinken estaría en Pekín el 18 de junio. Los medios estatales chinos dijeron que está previsto que visite China los días 18 y 19 de junio.

Durante su estancia, Blinken se reunirá con altos funcionarios chinos para "plantear cuestiones bilaterales de interés", así como otros asuntos globales y regionales y "desafíos transnacionales compartidos", según informó el Departamento de Estado en un comunicado.

Si el viaje de Blinken sigue adelante, será el primero a China del jefe de la diplomacia estadounidense en cinco años y la visita de más alto nivel de la administración del presidente Joe Biden, que ha chocado con Pekín por asuntos que van desde las acusaciones de espionaje hasta una disputa sobre semiconductores.

Blinken canceló un viaje previsto a Pekín en febrero a causa de un presunto globo espía chino que sobrevoló Estados Unidos. El Ministerio de Relaciones Exteriores chino aún no ha revelado ninguna otra información sobre la próxima visita de Blinken.

Las visitas de funcionarios estadounidenses a Taiwán, la isla con gobierno democrático que Pekín considera parte integrante de China, también han magnificado las tensiones entre las dos mayores economías del mundo.

(Escrito por Bernard Orr y John Geddie; editado en español por Carlos Serrano)