Estados Unidos y Corea del Sur también emitieron un aviso conjunto en el que afirmaban que el grupo lleva a cabo ciberataques "a gran escala" contra grupos de reflexión, instituciones académicas y medios de comunicación.

Se sabe que los piratas informáticos llevan a cabo campañas de spearphishing haciéndose pasar por periodistas reales, académicos u otras personas con vínculos creíbles con los círculos políticos norcoreanos, dijo el Ministerio de Asuntos Exteriores de Seúl.

El miércoles Corea del Norte lanzó al espacio su primer satélite espía, pero el lanzamiento acabó en fracaso al precipitarse al mar el propulsor y la carga útil.

"Los grupos de piratas informáticos norcoreanos, incluido Kimsuky, han participado, directa o indirectamente, en el llamado desarrollo de 'satélites' de Corea del Norte, robando tecnologías punteras sobre el desarrollo de armas, satélites y el espacio", declaró el ministerio surcoreano en un comunicado.

Estados Unidos, Corea del Sur y Japón afirmaron que cualquier lanzamiento realizado por Pyongyang con tecnología de misiles balísticos viola múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.

El ministerio surcoreano dijo que las últimas sanciones demuestran la voluntad de Seúl de hacer pagar a Corea del Norte por sus provocaciones.

Corea del Norte rechazó el jueves la condena del lanzamiento por parte de Washington y otros países, afirmando que tiene derecho soberano al desarrollo espacial y prometiendo poner pronto en órbita un satélite espía.