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En su plan bianual de política económica publicado el jueves, el ministerio de Finanzas espera que la economía crezca un 2,2% en 2024, por debajo del 2,4% observado en julio, tras expandirse un 1,4% en 2023, lo que supuso el mínimo de tres años.
El ministerio esperaba que los precios al consumo subieran un 2,6% este año, por encima de su anterior previsión del 2,3%. En 2023, los precios subieron un 3,6%.
"La recuperación económica será más fuerte (que el año pasado) gracias a la mejora del comercio mundial y de la demanda de semiconductores, pero habrá dificultades en la demanda interna y en los medios de subsistencia de la población debido a la persistencia de una inflación y unos tipos de interés elevados", declaró el ministerio.
El gobierno se centrará principalmente en la recuperación económica para la gente corriente, al tiempo que gestiona los posibles factores de riesgo, afirmó.
Las exportaciones de Corea del Sur aumentaron por tercer mes consecutivo en diciembre, ya que la demanda de chips empezó a repuntar, lo que aumenta las esperanzas de una recuperación económica impulsada por las exportaciones de semiconductores.
El banco central del país ha mantenido su tipo de interés oficial en el 3,5%, el más alto desde finales de 2008, desde la última subida de enero de 2023, en su lucha continua contra una inflación que se suaviza lentamente, pero que sigue siendo elevada.
El ministerio de Finanzas dijo que pretende reducir la inflación, que se situó en el 3,2% en diciembre, hasta el nivel del 2% en la primera mitad de 2024, con más medidas políticas, como recortes de impuestos y tarifas, y la congelación de los costes de los servicios públicos.
Para impulsar el consumo, el gobierno planea aumentar las exenciones fiscales sobre el gasto con tarjeta de crédito y continuar con los esfuerzos para atraer a más turistas extranjeros, incluyendo la exención de las tasas de expedición de visados para los turistas en grupo procedentes de China y otros países asiáticos.
Para las empresas, el ministerio dijo que introducirá nuevos recortes fiscales temporales sobre las inversiones en investigación y desarrollo y ampliará las exenciones fiscales existentes sobre las inversiones en instalaciones hasta finales de 2024.
El ministerio dijo que ampliará las medidas de apoyo a la liquidez si fuera necesario para evitar una contracción del crédito en constructores y proyectos inmobiliarios. El mes pasado, un constructor de tamaño medio solicitó una reestructuración de su deuda, lo que suscitó inquietud en el sector de la construcción.
