El número de muertos ha aumentado a 41 tras el ataque perpetrado el viernes por presuntos rebeldes islamistas contra aldeas del este de la República Democrática del Congo, según ha informado un portavoz del ejército congoleño.

El ataque fue llevado a cabo por miembros de las Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF), declaró el teniente coronel Mak Hazukay, portavoz del ejército en la provincia congoleña de Kivu Norte.

Las ADF, que tienen su base en el este del Congo, han prometido lealtad al Estado Islámico y llevan a cabo frecuentes ataques, desestabilizando aún más una región en la que actúan numerosos grupos militantes.

Procede de la vecina Uganda y se le acusa de estar detrás de otro asalto en el que murieron al menos 16 personas esta semana.

El viernes por la noche, hombres armados atacaron con armas de fuego y machetes a residentes de aldeas del territorio de Beni, según declaró a Reuters el funcionario local Fabien Kakule.

Vusindi Nick Junior, un líder de la sociedad civil local, dijo que un centro de salud local había sido incendiado y que nueve personas habían resultado heridas, además de los 41 muertos.

"Varias decenas de civiles han sido víctimas de las ADF en el este de la RDC en los últimos días. Los grupos terroristas se aprovechan del caos para ampliar su dominio en una región ya de por sí muy inestable", declaró la portavoz de Asuntos Exteriores de la UE, Nabila Massrali.

"Es urgente acelerar los esfuerzos para encontrar una solución política", añadió.

Julien Paluku, ex gobernador de Kivu Norte, declaró en X que el gobierno nacional del Congo debía hacer más para hacer frente a la inseguridad en el este. El gobierno aún no ha hecho ninguna declaración sobre el ataque. Un portavoz del gobierno no respondió a las peticiones de comentarios.

"La gente tiene la impresión, con razón o sin ella, de estar abandonada a su triste suerte", declaró.