Moody's, que tiene una perspectiva negativa para la firma, dijo que suponía que la empresa estaba recibiendo un elevado apoyo gubernamental, y que este apoyo podría verse comprometido por un deterioro en 2024 de las condiciones fiscales de México.

Pemex se encuentra entre las petroleras más endeudadas del mundo, con pasivos financieros que superan los 100.000 millones de dólares.

La agencia dijo que esperaba un déficit fiscal considerablemente mayor en México debido a los altos costos de endeudamiento, el gasto social y los proyectos emblemáticos del gobierno.

Moody's dijo que espera que los costes para seguir apoyando a Pemex se hayan incrementado para cuando la próxima administración de México asuma el poder en octubre.

La rebaja de la calificación se produce el mismo día en que el gobierno de México ordenó la expropiación de una planta de hidrógeno en una refinería de Pemex que había sido vendida a la francesa Air Liquide durante la administración anterior.