El token, que nació como una sátira de un frenesí de criptodivisas en 2013 y no tiene ningún uso fundamental, subió a 10 céntimos alrededor de las 1500 EST desde los 7 céntimos cuando Elon Musk indicó en un tuit el lunes que había cumplido su promesa de cambiar el logotipo de la aplicación de medios sociales por el perro de dogecoin.

Con una capitalización de mercado de 13.700 millones de dólares, dogecoin es ahora la séptima mayor criptodivisa, según el sitio de datos CoinMarketCap.com. Su valor de mercado rondaba los 10.000 millones de dólares antes de la noticia.

Musk, clasificado como la segunda persona más rica del mundo por Forbes, es un firme defensor de las criptodivisas y ha influido mucho en los precios de dogecoin y bitcoin en el pasado.

El viernes, el jefe de Tesla pidió a un juez estadounidense que desestimara una demanda por extorsión de 258.000 millones de dólares que le acusaba de dirigir una estafa piramidal para apoyar el dogecoin.

Dogecoin se duplicó con creces en octubre después de que Musk, apodado "el padre perro" por los operadores minoristas, cerrara un acuerdo de 44.000 millones de dólares para hacerse con Twitter en octubre.

El token shiba inu, un spinoff de dogecoin que cotiza en fracciones de céntimos, subió un 5,6% hasta los 0,000014 dólares.