Las protestas estallaron tras la duplicación de los precios de los carburantes para automóviles, que se sintió especialmente en el oeste de la vasta nación centroasiática, rica en petróleo, donde la mayoría de los conductores utilizan GLP en lugar de gasolina.
El descontento se convirtió rápidamente en los disturbios más graves desde que Kazajstán se separó de la Unión Soviética en 1991, y las tropas de paz dirigidas por Rusia acudieron para estabilizar la situación.
Las secuelas han visto cómo el presidente Kassym-Jomart Tokayev cimentaba su autoridad, el ex presidente Nursultan Nazarbayev parecía perder influencia y los familiares de Nazarbayev eran expulsados del poder.
Gaziz Makhambetov, que salió a la calle en la ciudad occidental de Zhanaozen el 2 de enero, dijo que se sentía utilizado.
"Ahora creo que lo hicieron (subir los precios del combustible) a propósito, para provocar a la gente", dijo a Reuters.
Dijo que las protestas, que rápidamente llevaron a las autoridades a cancelar la subida de precios, parecen haber sido diseñadas como parte de lo que él y muchos otros kazajos dicen que parece una lucha de poder entre el clan Nazarbayev y los aliados del presidente.
En Almaty, la mayor ciudad de Kazajstán, donde las protestas se volvieron violentas, Alibek, un taxista, dijo que había participado en una manifestación pacífica sólo para ver cómo hombres armados muy organizados se apoderaban del evento.
"Parecía que eran agentes de la seguridad del Estado o militares bien entrenados. Se movían por la plaza en pequeños grupos, contactando constantemente con alguien por teléfono".
Tokayev ha hablado de un intento de golpe de estado y ha culpado a lo que ha llamado terroristas entrenados en el extranjero. También ha criticado la actuación de la policía y de las fuerzas de seguridad que, según él, han manejado mal la situación. El viernes, elogió a Nazarbayev como el fundador del Kazajstán moderno.
Zhanbolat Mamai, un político de la oposición, dijo que personas vestidas de negro y camufladas y con máscaras le atacaron en la plaza principal de Almaty el 5 de enero.
"Parecían entrenados y organizados", dijo.
'TOKAYEV TIENE PLENOS PODERES'
Un disidente de Aktau, una ciudad portuaria del Caspio situada a unos 2.100 km al oeste de Almaty, describió a un grupo de hombres vestidos de negro y con máscaras.
"No temían a nadie", dijo el hombre, que pidió no ser identificado.
Cientos de hombres enmascarados también tomaron el aeropuerto de Almaty el 5 de enero y corresponsales de Reuters vieron a personas vestidas de negro y de camuflaje y con pasamontañas el 6 de enero dentro de la residencia presidencial, cerca de la alcaldía de Almaty.
En Aktau, el disidente dijo que la policía animó en un momento dado a los manifestantes a tomar el edificio del gobierno local.
En Almaty se produjeron los combates más intensos y los mayores destrozos. En la provincia de Almaty se encuentra el pueblo de Shamalgan, lugar de nacimiento de Nazarbayev, y está considerado como el bastión de su clan.
Poco después de que las fuerzas de seguridad sometieran los disturbios, un Nazarbayev de rostro sombrío apareció en la televisión estatal diciendo que Tokayev tenía plenos poderes.
"Entregué mis poderes al presidente Kassym-Jomart Tokayev en 2019 y desde entonces soy un jubilado, y ahora estoy (viviendo) retirado en la capital de Kazajstán y no me he ido a ningún sitio", dijo, haciendo frente a los rumores de que estaba en el extranjero. "El presidente Kassym-Jomart Tokayev tiene plenos poderes".
Aunque dijo que no había "ningún conflicto o enfrentamiento dentro de la élite", desde entonces varios familiares de Nazarbayev han sido destituidos o han dimitido de puestos clave en la seguridad del Estado, el gobierno, las empresas estatales y los grupos de presión.
Tokayev dijo el viernes que las autoridades seguían trabajando para establecer a los responsables de la violencia. También rechazó las "insinuaciones" sobre Nazarbayev y lo elogió como fundador del Kazajstán moderno.
"Demos el debido crédito a los logros históricos del primer presidente, centrémonos en sus innegables éxitos y virtudes, y consideremos los posibles errores como lecciones para los futuros gobernantes de nuestro país", dijo la oficina de Tokayev.
