Los camiones que intentan entrar en Estados Unidos desde México hicieron cola durante kilómetros el miércoles en medio de los retrasos relacionados con la migración récord en la frontera entre Estados Unidos y México, mientras que un grupo industrial dijo que el valor de las mercancías estancadas en México había superado los 1.500 millones de dólares.

Miles de camiones han quedado varados en el lado mexicano de la frontera después de que las autoridades estadounidenses cerraran los cruces e impusieran controles de seguridad adicionales en medio de un aumento de la migración.

En Ciudad Juárez, los camiones esperaban para cruzar un puente hacia Santa Teresa, Nuevo México, después de que se suspendiera temporalmente el procesamiento de carga en un puente que conecta la ciudad con El Paso, Texas, para permitir que los funcionarios de aduanas ayudaran a procesar a los migrantes que llegaban fuera de los cruces oficiales.

Los medios de comunicación locales dijeron que la fila de camiones se extendía 20kms (12 millas).

También el miércoles, el grupo de autotransporte CANACAR expresó en un comunicado su "profunda preocupación" por las inspecciones de Texas a los camiones que cruzan la frontera desde México, que según dijo han impedido la entrada a EE.UU. de más de 1.500 millones de dólares en mercancías.

"Esta medida ha generado una crisis que ha resultado en cierres, desvíos, tiempos de cruce más largos y reducciones significativas en los volúmenes de exportación de diferentes productos de México a Estados Unidos", dijo CANACAR.

La declaración de la CANACAR se produce un día después de que el gobierno del estado fronterizo de Chihuahua dijera que los costes de una fuerte reducción de camiones de carga con destino a EE.UU. habían ascendido a casi 1.000 millones de dólares en unas dos semanas.

Además de la desaceleración de camiones y tráileres, miles de vagones de ferrocarril también se estancaron en los últimos días después de que las autoridades fronterizas detuvieron temporalmente el procesamiento en el puente del cruce internacional de ferrocarril en Eagle Pass, Texas.

Algunos trenes de carga con destino a EE.UU. también se vieron interrumpidos cuando un importante operador mexicano de ferrocarriles de carga suspendió temporalmente sus operaciones después de que los migrantes murieran o resultaran heridos al saltar a los trenes.

Las medidas provocaron que la cancillería mexicana instara a las autoridades estadounidenses a no tomar "medidas unilaterales" que compliquen el comercio. (Reportaje de José Luis González en Ciudad Juárez y Brendan O'Boyle en Ciudad de México; Edición de Michael Perry)