La declaración se produce después de que el periódico ruso Kommersant informara de que BSH estaba en conversaciones con varias empresas, entre ellas la china Hisense, para vender sus instalaciones de producción cerca de San Petersburgo.

Kommersant citó a una fuente del mercado de la electrónica diciendo que BSH había lanzado una licitación a principios de año, y que la china Midea y un inversor turco desconocido también estaban entre los principales candidatos.

Decenas de empresas han optado por salir de Rusia o han anunciado planes para hacerlo desde que Moscú lanzó una invasión a gran escala de Ucrania el 24 de febrero del año pasado.

BSH dijo que las sanciones habían interrumpido la mayor parte de sus negocios con clientes rusos y en Rusia, o los habían paralizado, durante muchos meses.