En su informe trimestral sobre política monetaria, el banco también elevó su previsión de crecimiento para 2024 por los fuertes flujos migratorios y el aumento del gasto de los hogares.
La inflación ha descendido en los últimos meses, pero con un 2,8%, sigue estando por encima del objetivo del 2% fijado por el banco. Según el banco, el aumento de los precios de la gasolina la mantendrá en torno al 3% en el segundo trimestre, antes de que descienda gradualmente hasta el 2% a finales de 2025.
El gobernador, Tiff Macklem, había indicado anteriormente que el banco central podría empezar a recortar este año, pero el miércoles no dio pistas sobre un calendario.
"Los datos desde enero han aumentado nuestra confianza en que la inflación seguirá bajando gradualmente, incluso a medida que se fortalezca la actividad económica", declaró a los periodistas en su discurso de apertura.
"¿Qué necesitamos ver para convencernos de que ha llegado el momento de recortar? La respuesta corta es que estamos viendo lo que necesitamos ver, pero necesitamos verlo durante más tiempo para estar seguros de que el progreso hacia la estabilidad de precios se mantendrá."
Una serie de datos recientes, principalmente la sorpresiva caída de la inflación en febrero hasta el 2,8% y el debilitamiento de las condiciones del mercado laboral, han llevado a los mercados monetarios a adelantar sus apuestas por un recorte de los tipos en junio hasta cerca del 85%. Un recorte de 25 puntos básicos en julio está totalmente descontado.
El banco dijo que el crecimiento en 2024 sería del 1,5%, por encima del 0,8% que proyectó en enero. Dijo que la economía se expandiría un 2,2% en 2025, por debajo del 2,4% previsto anteriormente.
Sobre una base anualizada, el banco dijo que la economía había crecido un 1,0% en el tercer trimestre de 2023, por encima de la previsión anterior de crecimiento nulo, y que se había disparado un 2,8% en el cuarto trimestre, mucho más que la previsión del 0,5%.
"El fuerte crecimiento demográfico está aumentando la demanda de los consumidores, así como la oferta de trabajadores, y se prevé que el gasto de los hogares se recupere a lo largo del año", declaró Macklem.
Los elevados tipos de interés están contribuyendo a alimentar una crisis inmobiliaria y la inflación de los precios de la vivienda sigue siendo elevada, lo que ejerce más presión sobre el gobierno del primer ministro Justin Trudeau.
El banco central ha aumentado los costes de endeudamiento en 475 puntos básicos en un espacio de 17 meses, hasta el 5%, y los mantiene en ese nivel desde julio del año pasado.
Los analistas han expresado su preocupación por el hecho de que bajar los tipos de interés demasiado pronto podría hacer que un gran número de compradores de viviendas volvieran al mercado, disparando la inflación.
"No queremos dejar la política monetaria tan restrictiva más tiempo del necesario", dijo Macklem. "Pero si bajamos el tipo de interés oficial demasiado pronto o lo hacemos demasiado rápido, podríamos poner en peligro los progresos que hemos hecho para reducir la inflación".
El próximo anuncio de tipos se publicará el 5 de junio.
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