La declaración de emergencia autoriza a la Agencia Federal para la Gestión de Emergencias (FEMA) a coordinar los esfuerzos de ayuda en caso de catástrofe y movilizar los recursos de emergencia, según informó la Casa Blanca en un comunicado.

En la última semana, el mal tiempo provocó violentas ráfagas de viento que derribaron camiones, inundaron las calles de pequeñas ciudades a lo largo de la costa norte de California y agitaron una marejada ciclónica que destruyó un muelle en Santa Cruz.