"Es importante que se establezcan ahora las bases para una regulación sólida del sistema criptofinanciero antes de que el ecosistema de las criptomonedas sea tan grande o esté tan interconectado que pueda suponer riesgos para la estabilidad del sistema financiero más amplio", dijo Brainard en unas observaciones preparadas para una conferencia del Banco de Inglaterra en Londres.

En un discurso a todo trapo, Brainard argumentó que no hacerlo almacenaría problemas para el futuro y dijo que hasta que no haya barandillas sólidas para las criptofinanzas, la participación de los bancos podría afianzar aún más un "ecosistema más arriesgado y menos conforme".

Los riesgos de las criptodivisas y las "stablecoins" poco reguladas, cuyo valor se disparó durante la pandemia de la COVID-19, han saltado a la palestra con la fuerte caída del mercado de las criptodivisas y el desplome de las principales "stablecoin", como TerraUSD. La criptodivisa líder, Bitcoin, ha caído más del 75% desde su máximo histórico en los últimos siete meses.

Brainard señaló que las criptodivisas son muy vulnerables al desapalancamiento, a las ventas masivas y al contagio, y argumentó que las nuevas tecnologías y la ingeniería financiera no pueden transformar por sí solas los activos de riesgo en activos seguros.

La cooperación nacional e internacional sería necesaria, dijo Brainard, para garantizar el cumplimiento de las regulaciones existentes y adaptar las nuevas, en particular en el ámbito de los protocolos y plataformas descentralizadas.

"La futura resistencia financiera se verá muy reforzada si nos aseguramos de que el perímetro regulatorio abarca el sistema financiero criptográfico y refleja el principio de mismo riesgo, misma divulgación, mismo resultado regulatorio", dijo Brainard.

Añadió que una moneda digital del banco central de Estados Unidos, a la que ella ha mostrado su apoyo, podría ayudar a la estabilidad financiera "proporcionando la capa de liquidación neutral de confianza en el futuro sistema criptofinanciero."