Estas discusiones pueden parecer inútiles. De hecho, todos los observadores parecen estar de acuerdo en un punto: nadie (ni siquiera los republicanos) quiere que Estados Unidos entre en suspensión de pagos en junio. La explosión sería demasiado grande. Por tanto, la pauta plausible sería, al final del fin de semana, llegar a un acuerdo para elevar el techo hasta 2025. Los escollos estarían entonces más en los detalles de la asignación: cómo categorizar o compensar ciertos gastos, si reducir los fondos destinados a infraestructuras energéticas, etc.

Sin embargo, el pulso tuvo el mérito de poner de relieve el poder del partido de la oposición y ciertas divergencias dentro del propio Partido Demócrata. Tanto es así que Joe Biden, de visita en Japón, decidió acortar su estancia para venir a apoyar a su campo y unir a sus tropas. Ante semejante embrollo, sólo podemos sugerir un poco de investigación en Chat GPT: con un poco de suerte, el robot de inteligencia artificial tiene una solución que proponer al presidente estadounidense.

 

ChatGPT, dibújame el techo de deuda
Dibujo de Amandine Victor para MarketScreener