La propuesta podría anunciarse durante la visita del presidente Luiz Inácio Lula da Silva a Pekín la próxima semana, aunque funcionarios del gobierno dijeron que aún quedaban algunos detalles por concretar.

"No sé si será posible anunciarlo, porque estas cosas son complejas, pero la idea es tener un fondo bilateral... para inversiones en esta área", dijo a Reuters el principal asesor de política exterior de Lula, Celso Amorim.

Amorim dijo que espera un acuerdo sobre energías renovables durante la visita de Lula, que incluye una reunión con el presidente chino, Xi Jinping, el martes.

La ministra brasileña de Medio Ambiente, Marina Silva, que formará parte de la delegación de Lula, dijo que el nuevo fondo en discusión se utilizaría para recuperar bosques y desarrollar una economía más sostenible, incluyendo la producción de hidrógeno verde.

"Nuestra expectativa es que podamos tener una agenda sobre cambio climático que sea estratégica para el mundo, porque es sin duda uno de los mayores desafíos actuales de la humanidad", dijo Silva a Reuters.

Brasil ya recibió un compromiso de la administración del presidente estadounidense Joe Biden sobre política climática y protección forestal cuando Lula visitó la Casa Blanca el mes pasado, dijo.

En el caso de China, el mayor emisor de gases de efecto invernadero del mundo, Silva espera que haya "una agenda cada vez más fuerte sobre la cuestión del clima, la protección de los bosques y la biodiversidad".

Silva dijo, sin embargo, que China no se unirá al Fondo Amazónico de mil millones de dólares puesto en marcha por Noruega para financiar el desarrollo sostenible y proteger la mayor selva tropical del mundo, al que España, Francia y Gran Bretaña están estudiando unirse y Estados Unidos se ha comprometido a apoyar.