El loonie cotizaba un 0,1% más alto, a 1,3470 por dólar, o 74,24 centavos de dólar, tras moverse en un rango de 1,3455 a 1,3491.
Entre las divisas del G10, sólo la corona sueca se comportó mejor que la moneda canadiense, ya que el dólar estadounidense amplió sus recientes ganancias frente a una cesta de divisas principales.
"La Fed y el Banco de Canadá son actualmente los bancos centrales más halcones del G10", dijo Tony Valente, corredor de divisas senior de AscendantFX.
La semana pasada, la Fed pronosticó que la política monetaria se mantendría significativamente más restrictiva hasta 2024 de lo previsto anteriormente, mientras que unos datos de inflación interna mejores de lo esperado reforzaron las apuestas a que el BoC subiría más los tipos de interés.
Los mercados monetarios ven aproximadamente un 50% de posibilidades de una subida de tipos en la próxima decisión política del BoC el 23 de octubre y han descontado totalmente otro endurecimiento para marzo.
Aún así, los especuladores han aumentado sus apuestas bajistas sobre el dólar canadiense hasta el máximo desde mayo, según mostraron el viernes los datos de la Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas. Hasta el 19 de septiembre, las posiciones cortas netas habían aumentado a 48.027 contratos desde los 41.883 de la semana anterior.
El precio del petróleo, uno de los principales productos de exportación de Canadá, se situó un 0,4% por debajo, en 89,68 dólares el barril, al relajar Rusia su prohibición de exportar combustible.
El rendimiento de la deuda pública canadiense subió a través de una curva más pronunciada, siguiendo los movimientos de los bonos del Tesoro estadounidense. El bono a 10 años subió 11,2 puntos básicos hasta el 4,026%, su primer movimiento por encima del umbral del 4% desde enero de 2008. (Reportaje de Fergal Smith, Edición de Nick Zieminski)
