En su Revisión de la Política Monetaria de abril, el banco central dijo que los cortes de electricidad continuaban también ralentizando el crecimiento, reiterando que recortarían hasta 2 puntos porcentuales de las perspectivas de crecimiento en 2023, el doble del impacto estimado el año anterior.

Sudáfrica sólo ha tenido un día de suministro eléctrico ininterrumpido en 2023, ya que la compañía eléctrica estatal Eskom lucha por mantener las luces encendidas en la economía más industrializada de África.

El SARB afirmó que la inflación general ha alcanzado su punto máximo en julio de 2022, el 7,8%, pero que la inflación subyacente -que excluye los precios de los alimentos, las bebidas no alcohólicas, el combustible y la energía- sigue siendo elevada.

"Se espera que el aumento de la inflación subyacente ralentice el ritmo de desinflación de la inflación general a corto plazo", declaró el banco central.

La inflación general de Sudáfrica se situó en marzo en el 7,1% interanual.