El Plan de Compensación de los Servicios Financieros del Reino Unido se está revisando urgentemente tras la rápida quiebra del Silicon Valley Bank el mes pasado, añadió el FT citando a personas informadas del asunto.

Un portavoz del Banco de Inglaterra declinó hacer comentarios sobre el informe.

La quiebra el mes pasado del Silicon Valley Bank y de otros dos prestamistas en Estados Unidos, junto con la adquisición forzosa del Credit Suisse por parte de UBS hizo que las acciones bancarias cayeran en picado en todo el mundo, pero los mercados se han calmado desde entonces.

El gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, dijo la semana pasada que el banco central británico estaba considerando la posibilidad de mejorar su enfoque sobre el pago a los depositantes de los bancos más pequeños, centrándose en la rapidez de los pagos.

"Ir más allá y considerar un aumento de los límites de protección de los depósitos podría tener implicaciones de costes para el sector bancario en su conjunto", dijo Bailey el miércoles en Washington, donde asistía a las reuniones del Fondo Monetario Internacional. "Como en todo lo relacionado con la resolución bancaria, no hay almuerzo gratis".

La mayor preocupación por la seguridad de los bancos a nivel mundial ha suscitado dudas sobre hasta dónde deben llegar las autoridades para apuntalar el sector en caso de necesidad, en particular los prestamistas regionales de Estados Unidos.

El FT, citando a sus fuentes, afirmó que a los reguladores les preocupaba que el límite de 85.000 libras de la garantía británica sólo cubriera alrededor de dos tercios de los depósitos y que el nivel relativamente bajo de prefinanciación supusiera retrasos de al menos una semana para que los clientes recuperaran el acceso a su efectivo.