El prestamista mundial de última instancia dijo que su Junta Ejecutiva había debatido un documento, "Elementos de políticas eficaces para los criptoactivos", que proporcionaba "orientación a los países miembros del FMI sobre los elementos clave de una respuesta política adecuada a los criptoactivos".

Tales esfuerzos se han convertido en una prioridad para las autoridades, dijo el fondo, tras el colapso de una serie de bolsas y activos criptográficos en los últimos dos años, añadiendo que no hacer nada era ahora "insostenible".

La principal recomendación fue "salvaguardar la soberanía y la estabilidad monetarias reforzando los marcos de política monetaria y no conceder a los criptoactivos el estatus de moneda oficial o de curso legal".

El FMI había arremetido contra El Salvador a finales de 2021, cuando el país centroamericano se convirtió en el primero en adoptar el bitcoin como moneda de curso legal, una medida que desde entonces ha copiado la República Centroafricana.

Otros consejos de la lista del jueves, que llega mientras los responsables de la toma de decisiones del G20 se reúnen en la India, incluían protegerse contra los flujos de capital excesivos, adoptar normas y leyes fiscales inequívocas en torno a los criptoactivos, y desarrollar y aplicar requisitos de supervisión para todos los actores del criptomercado.

Los países también deberían establecer acuerdos internacionales para mejorar la supervisión y hacer cumplir las regulaciones, añadió el FMI, así como establecer formas de controlar el impacto del cripto en la estabilidad del sistema monetario mundial.

Esbozando la evaluación de su Directorio Ejecutivo, el FMI dijo que los directores acogieron favorablemente las propuestas y estuvieron de acuerdo en que la adopción generalizada de los criptoactivos "podría socavar la eficacia de la política monetaria, eludir las medidas de gestión de los flujos de capital y exacerbar los riesgos fiscales".

También estuvieron "de acuerdo en general" en que no se debe conceder a los criptoactivos el estatus de moneda oficial o de curso legal, y aunque las prohibiciones estrictas de los activos "no son la mejor opción", algunos directores opinaron que no deben descartarse.