La aprobación se produce en medio de un aumento de las peticiones para que los países europeos compren más armamento de producción estadounidense, ya que la invasión rusa de Ucrania impulsa un panorama de seguridad cada vez más incierto.

El gobierno británico, que probablemente empezó a negociar el acuerdo mucho antes de la invasión de Ucrania hace tres semanas, pretende comprar un radar de defensa contra misiles balísticos y dos sistemas de gestión de batalla y comunicaciones de mando y control fabricados por Lockheed Martin Corp.

El Departamento de Estado señaló que la venta apoyaría los objetivos de la política exterior estadounidense "al mejorar la seguridad de un aliado de la OTAN que es una fuerza para la estabilidad política y el progreso económico en Europa."