El Senado argentino votó el jueves a favor de rechazar el extenso "megadecreto" de reformas económicas del presidente Javier Milei, un duro golpe para la agenda de austeridad del líder libertario en su intento de remediar la maltrecha economía del país.

Milei, un economista outsider cuyo partido tiene minoría en el Congreso, asumió el cargo en diciembre y utilizó sus poderes de decreto presidencial para poner en marcha medidas que van desde las privatizaciones a las reformas laborales.

El decreto, que originalmente contenía más de 600 artículos, fue rechazado en una votación de 42-25, con cuatro abstenciones, y sólo podrá ser desechado definitivamente si también lo rechaza la cámara baja argentina.

El partido del presidente tiene minoría en ambas cámaras.

La votación del jueves supuso una segunda derrota legislativa después de que los legisladores frenaran el mes pasado un paquete de reformas de gran calado propuesto por separado.

El senador de la oposición Martin Lousteau dijo que su voto en contra del decreto el jueves era "muy simple: Es inconstitucional".

El decreto de diciembre, emitido a los pocos días de gobierno del nuevo presidente, dio el pistoletazo de salida al enfoque de tratamiento de choque de Milei para los crónicos males económicos de Argentina, un plan que incluía su devaluación del peso local en más de un 50%.

Las medidas del gobierno han conseguido mover los desequilibrios fiscales y comerciales del país en una dirección favorable, aunque también han pasado factura a gran parte de la población. La inflación anual se disparó al 276% el mes pasado, y los niveles de pobreza ascendieron al 57% de la población. (Reportaje de Lucila Sigal en Buenos Aires; Redacción de Brendan O'Boyle; Edición de Nia Williams y Chris Reese)