LONDRES, 5 sep (Reuters) - Una agencia de la Unión Europea y un organismo mundial de estandarización afirmaron el martes que han alcanzado un "hito" para ayudar a las empresas internacionales a evitar costosas duplicaciones en la divulgación de información relacionada con el clima.

Se están ultimando varios conjuntos de normas de divulgación obligatoria para sustituir al conjunto de buenas prácticas voluntarias del sector privado.

Los reguladores lo consideran fundamental para acabar con el "lavado verde", es decir, con las empresas que restan importancia al impacto del cambio climático, pero también quieren "interoperabilidad" para evitar costes innecesarios a las empresas que apliquen más de un conjunto de normas de divulgación.

La UE está ultimando sus Normas Europeas de Información sobre Sostenibilidad (ESRS), elaboradas por su órgano consultivo EFRAG. Exigirán a unas 50.000 empresas que revelen cómo afecta el cambio climático a sus operaciones, y cómo las propias empresas contribuyen al cambio climático, lo que se conoce como doble materialidad.

Las empresas utilizan desde hace tiempo las normas de divulgación del organismo mundial de normalización GRI sobre el impacto de las empresas en el medio ambiente, por lo que temen tener que duplicar la información cuando se apliquen las normas de la UE.

"Los actuales informadores de GRI estarán bien preparados para informar con arreglo al ESRS", afirmaron EFRAG y GRI en una declaración conjunta el martes.

"Se considera que las entidades que informan con arreglo al ESRS informan con referencia a las normas GRI y, por lo tanto, evitarán la carga de la presentación de informes múltiples".

GRI se ha asociado con el nuevo Consejo Internacional de Normas de Sostenibilidad (ISSB, por sus siglas en inglés), que acaba de ultimar su primer conjunto de normas para que las empresas revelen cómo afecta el cambio climático a sus resultados.

La combinación de ISSB y GRI pretende reproducir la "doble materialidad" de las normas de la UE.

El ISSB también ha hecho que su propia información sea "interoperable" con el ESRS.

Las empresas aún están a la espera de conocer la forma definitiva de la información sobre el clima en Estados Unidos y hasta qué punto se ajustará a las normas de la ISSB y la UE.

(Reporte de Huw Jones; Edición de Christina Fincher, editado en español por José Muñoz)